Los reyes del Reino Unido, Carlos III y Camilla, se reunieron en las últimas horas con el papa Francisco, quien los recibió en la Casa Santa Marta, en donde se recupera de su internación de 37 días por una neumonía bilateral. En una foto publicada por el Vaticano, se pudo ver al jefe de la Iglesia católica sin cánulas nasales de oxígeno, lo que da cuenta de una mejoría en su estado de salud.

El encuentro privado tuvo lugar el último miércoles por la tarde durante la visita oficial de los miembros de la realeza británica a Italia y coincidió con su 20° aniversario de matrimonio y el cuarto del fallecimiento de Felipe de Edimburgo.

A través de un comunicado, la Oficina de Prensa de la Santa Sede precisó en ese sentido que el Sumo Pontífice "ha expresado sus mejores deseos a Sus Majestades" y que anheló una "pronta recuperación" para Carlos III, quien había sido hospitalizado a finales de marzo por los efectos secundarios de un tratamiento contra el cáncer.

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El Palacio de Buckingham había anunciado una reunión oficial con Francisco a principios de marzo, cuando el Papa atravesaba sus primeras semanas de internación por una neumonía bilateral. En ese entonces, precisaron que los monarcas pasarían la primera etapa de su viaje a Italia para celebrar el Jubileo en el Vaticano.

Sin embargo, en una nota del 24 de ese mismo mes anunciaron que el rey Carlos III y su consorte ya no verían al jefe de la Iglesia católica debido a su estado de salud. En ella, manifestaron "sus mejores deseos para su convalecencia" y agregaron que esperaban "visitar la Santa Sede tan pronto como se haya recuperado".

Ese anhelo se cumplió en las últimas horas durante su visita de tres días al país del sur europeo, en donde se reunieron con el Presidente de la República, Sergio Mattarella, y con la Primera Ministra, Giorgia Meloni. Además, el Rey se dirigió a la Asamblea del Parlamento en el Palacio Montecitorio.

El Papa, quien había sido hospitalizado el pasado 14 de febrero y fue dado de alta el 23 de marzo, permaneció dos semanas aislado en su residencia y volvió a mostrarse en público el 6 de abril en la plaza San Pedro del Vaticano, adonde llegó en silla de ruedas y con oxígeno suministrado por cánulas nasales.