El Partido Popular ganó en España, pero sin lograr la mayoría absoluta
Si bien Nuñez Feijóo anticipó que pretende formar el nuevo gobierno, Pedro Sánchez podría conservar el poder.
El Partido Popular (PP), con Alberto Nuñez Feijóo a la cabeza, se impuso este domingo en las elecciones legislativas en España, pero con una leve ventaja sobre el oficialista Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que tiene al mando a Pedro Sánchez, actual jefe de Gobierno.
De acuerdo con los datos oficiales el PP obtuvo 136 escaños, contra 122 del PSOE, mientras que Vox, con Santiago Abascal, logró 33, y Sumar, con Yolanda Díaz, alcanzó los 31. De todas maneras, y con estas cifras, a Nuñez Feijóo no le alcanza para formar un nuevo gobierno, ni siquiera uniéndose a Vox.
De todas formas, el líder de PP señaló en su discurso tras el cierre del comicio: "Me hago cargo de iniciar el diálogo para formar Gobierno y pido que nadie tenga la tentación de volver a bloquear España".
Entre el PP y Vox, con ciertas coincidencias en sus propuestas, tienen 169 escaños en el Congreso, y quedaron a siete de la mayoría absoluta, mientras que el PSOE y Sumar obtuvieron 153, por lo que todo dependería de las alianzas de cara al futuro inmediato del gobierno español.
Con estos números, los encuestadores locales destacaron la buena elección del oficialismo, que había quedado golpeado tras las municipales y autonómicas del 28 de mayo, cuyos resultados obligaron a Sánchez a adelantar para hoy los comicios legislativos.
Motivado por el resultado, Sánchez habló del "fracaso del bloque de derechas", en su primera intervención, y añadió que "Tenemos más votos y más escaños que hace cuatro años. Había mucha gente preocupada y hoy van a dormir más tranquilos".
"El bloque involucionista ha fracasado. Son más los españoles que quieren que España avance y así va a seguir siendo", agregó un eufórico Sánchez, quien podría continuar en su cargo.
El Parlamento saliente permitiría que Sánchez pueda repetir su mayoría, aunque necesitaría la abstención de Juntas -el partido de Carles Puigdemont-, y hace muy difícil que Feijóo lo logre, porque no tendría el apoyo necesario para ser investido como nuevo jefe de Gobierno.