Un jurado británico absolvió por mayoría el miércoles al actor estadounidense Kevin Spacey de nueve cargos por abuso sexual que se lo acusaba de haber cometido entre 2004 y 2013, cuando trabajaba en el teatro Old Vic de Londres.

Entre lágrimas, tras conocerse el veredicto después de 12 horas y media de deliberación, Spacey dijo que estaba "honrado" de que el jurado lo declarara inocente de llevar a cabo múltiples agresiones sexuales contra cuatro hombres.

La estrella de Hollywood, que además celebraba su cumpleaños número 64 el mismo día en que se definió el juicio, comenzó a llorar y articuló un "gracias" a los nueve hombres y tres mujeres del jurado, antes de secarse las lágrimas con un pañuelo. El actor habló con cinco de ellos en el vestíbulo de Southwark Crown Court y salió del edificio judicial tras el fallo para dirigirse a una nube de periodistas y fotógrafos. 

"Me imagino que muchos de ustedes pueden entender que tengo mucho que procesar después de lo que acaba de pasar hoy", afirmó Spacey. "Me siento honrado por el resultado de hoy", agregó.

El protagonista de la popular serie “House of Cards”, donde interpretaba a un inescrupuloso político llamado Francis Underwood, también reveló que estaba "enormemente agradecido con el jurado por haberse tomado el tiempo de examinar todas las pruebas y todos los hechos cuidadosamente antes de llegar a su decisión".   

Spacey fue rodeado por cámaras mientras caminaba hacia un taxi que lo esperaba, en tanto algunos miembros del público aplaudían y le deseaban feliz cumpleaños y una mujer gritaba: "Te amamos, Kevin".

Durante el juicio de cuatro semanas, los fiscales describieron al actor como un "acosador sexual" que toqueteó agresivamente a tres de los hombres y le practicó sexo oral al cuarto mientras se había desmayado en el apartamento de Spacey en Londres.   

El actor, juzgado bajo su nombre completo Kevin Spacey Fowler, dijo como evidencia que el caso en su contra era débil y que los incidentes, si es que ocurrieron, fueron consensuados. Añadió que era una persona promiscua, un "gran coqueto" que tenía "encuentros sexuales casuales e indiscriminados".

Spacey había manifestado al tribunal que tres de los cuatro denunciantes habían presentado demandas civiles en su contra, y que había encargado a investigadores privados que analizaran al menos a tres de los cuatro hombres.