Inflación, reproches a los supermercados y ¿un aviso? del oficialismo: los economistas de la oposición culpan a la casa de la moneda

El aumento de precios es un problema que preocupa y mucho en el Gobierno. Es que ataca, principalmente, el bolsillo de los asalariados, aquellos que le hicieron un llamado de atención en las PASO al Frente de Todos. En la Casa Rosada tomaron nota de las demandas y empezaron a delinear el camino para llegar con más aire a noviembre.

La secretaria de Comercio Interior, Paula Español, se reunió con las autoridades de las principales cadenas de supermercados del país -y casi como una súplica- pidió la colaboración de los grandes centros de comercialización para “cuidar el poder adquisitivo, la capacidad de compra y el bolsillo”.

Con los planteos sobre la mesa, Español fijó como eje principal la necesidad dar “previsibilidad hasta fin de año y evitar subas especulativas”. En ese sentido, también remarcó que “no hay razón” para que haya incrementos de precios por aumento en la demanda porque hay capacidad para abastecer estos productos.

Esta nueva etapa que comienza en la Secretaría, previo a las generales de noviembre, será de vigilancia estricta para evitar el abuso de precios y verificar el cumplimiento de la Ley de Góndolas. Para el oficialismo, las disposiciones de control son efectivas. “La medida que se tomó con la carne logró tener un parate en los precios”, afirmó la funcionaria, sobre el cepo que existía para las exportaciones de carne.

Por su parte, Cecilia Moreau solicitó que se cumpla la Ley de Góndolas y aclaró que “no es una amenaza” pedir “clausurar sucursales”, sino que se trata de efectivizar la normativa.

Críticas de la oposición

“Es un disparate total”, expresó Martín Tetaz a El Canciller, sobre los dichos de la diputada del Frente de Todos. “Lo que causa la inflación en la Argentina es la impresión descontrolada de la casa de la moneda”, explicó el candidato a diputado de Juntos.

Para Tetaz, en el oficialismo “no entienden cómo funciona la economía”. Y, en ese sentido, detalló: “Si cerrás sucursales, hay menos oferta y suben los precios”.

“No hay ningún país del mundo que haya controlado la inflación haciendo conversaciones con supermercados”, analizó el economista, y agregó que “esos países tienen un Banco Central independiente”.

“Es como si tuviera conversaciones con las clínicas para frenar el coronavirus. Lo que veo en la clínica es la consecuencia. El supermercado es la consecuencia de la inflación, no la causa”, ejemplificó el candidato.

Por otra parte, observó que en el marco de las elecciones, el Frente de Todos “necesita mostrar que la ineptitud del 50% de inflación no es culpa de ellos porque sino ni siquiera pueden presentarse”.

“A Moreau hay que encerrarla en el Borda”, cruzó fuerte José Luis Espert los dichos de la diputada del Frente de Todos. En coincidencia con Tetaz, para el candidato a diputado la Ley de Góndolas también “es un disparate”. El economista liberal sostuvo que no tienen “nada que ver los precios caros con los supermercados”, y recomendó al Gobierno que “si quieren bajar los precios introduzcan competencia”.

Asimismo, dijo a este medio que “los precios caros tienen que ver con el gran costo en medio de la cadena”, y señaló que “el control de precios no funcionó nunca”.

Para el candidato de Avanza Libertad por la Provincia de Buenos Aires, en el oficialismo “son brutos y si no son brutos son perversos y ficcionan” porque esa medida “no produce ningún efecto, pero buscan que la gente crea que ellos hacen algo”.