El Gobierno oficializó la reducción del impuesto PAIS a las importaciones, cuyo porcentaje bajó del 17,5% al 7,5%, a través del decreto 779/2024, publicado este lunes en el Boletín Oficial con las firmas del presidente Javier Milei, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos

La medida, que no impacta en la compra del dólar oficial para ahorro ni en los gastos en el exterior -que seguirán como hasta ahora-, tiene como finalidad reducir los costos que pesan sobre los productos e insumos que provienen del exterior y cuyo efecto se refleja en el nivel general de precios.

La merma de 10 puntos porcentuales del impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) sobre todo beneficiará a los importadores, quienes accederán a la compra de dólares a un tipo de cambio próximo a los $1.020, desde alrededor de $1.115 actuales, teniendo en cuenta el precio mayorista del billete verde, la devaluación del 2% mensual y el 7,5% del gravamen.

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El escrito confirmó la sustitución del "artículo 29 del decreto N°1330 del 30 de septiembre de 2004", y además explicó que "el usuario directo del presente régimen podrá importar mercaderías destinadas a la reposición de aquellas que sean idénticas y que, previamente importadas, y luego de ser objeto de alguno de los procesos de perfeccionamiento industrial, hayan sido exportadas para consumo". 

La carga tributaria del impuesto PAIS en el precio de venta final con IVA puede ser de 2%, 4% y 6% para ciertos bienes nacionales que utilizan insumos importados, dependiendo la estructura de costos. En el caso que la incidencia sea del 2%, la reducción del tributo podría significar una baja de precios del 1,14%, lo que, por ejemplo, llevaría a que un producto que cuesta $1.000 pase a valer $11,40 menos.

Mientras que esa disminución en el costo de las importaciones impactaría a la baja en las cifras del Índice de Precios al por Mayor (IPIM), no habrá cambios para aquellas personas que compran divisas en el mercado oficial para atesoramiento y para cubrir gastos en el exterior debido a que la alícuota en ese caso sigue vigente hasta finales de 2024. 

"El impuesto PAIS es muy dañino. En septiembre lo bajamos la 7,5%. Eso va a tener un impacto en la inflación. El oficial se mantendrá igual", había adelantado Caputo en julio pasado. Por otra parte, el titular del Palacio de Hacienda resaltó: "Con la baja de este tributo, las cámaras empresariales se han comprometido a bajar precios y es otra forma de trabajar juntos y tener conciencia de país".

En el caso de la agroindustria, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), Gustavo Idígoras, destacó que el recorte del tributo es "una gran noticia, ya que Argentina importa fertilizantes y es un insumo critico para lograr rendimientos en granos que luego se exportan".

A su vez, destacó que "tendría efectos favorables para los productores de soja y maíz que deben tomar decisiones de siembra entre septiembre y octubre, más aún en un contexto de márgenes de siembra muy ajustados por la fuerte caída de los precios internacionales y la suba que tuvo el gasoil a comienzos de año". 

Por el lado de las automotrices, consideraron que la medida reducirá los costos, y eso debería repercutir también en una mejora en los precios de exportación y, por lo tanto, en la competitividad; ya que el 25% del valor de las ventas al exterior son impuestos en este sector.

Por su parte, para los fabricantes de electrodomésticos, el recorte del tributo les abaratará los insumos importados pero indicaron que el efecto sobre los precios de venta al público no será significativo porque es un porcentaje pequeño del costo total. Otras fuentes de la industria afirmaron que sí podría verse reflejada la merma en el valor de algunos celulares de gama media, en un rango de entre 6 y 10% que podría ampliarse desde noviembre próximo.

El impuesto PAIS fue instaurado por la Ley 27.541 en diciembre del 2019, en una de las primeras medidas impulsadas por Alberto Fernández al inicio de su mandato. Este tributo aplica a determinadas transacciones en moneda extranjera y se implementó con una duración limitada de cinco períodos fiscales, es decir, hasta finales de 2024, salvo que se apruebe una nueva legislación para su prórroga.