En una noticia muy esperada por el oficialismo, finalmente el Gobierno pudo oficializar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que servirá para sostener un camino que busca eliminar los desbalances económicos y reducir el déficit fiscal y la inflación.

En una conferencia de prensa del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, se presentó el programa de stand by que consta de un préstamo de US$50 mil millones por 36 meses.

Para alcanzar los objetivos de convergencia más rápida al equilibrio fiscal y de reducción de la inflación, el plan presentado por el Gobierno dispone una reducción acumulada del déficit de 3,1% del PBI entre 2018 y 2021.

El préstamo y las condiciones

Según indicó el titular de la cartera de Hacienda, el préstamo se oficializará el próximo 20 de junio, cuando se deposite la primera cuota por un 30% del acuerdo: US$15 mil millones. El resto del monto llegará a la Argentina en distintas cuotas.

A cambio del mismo, el organismo liderado por la francesa Christine Lagarde le exigió a Dujovne y Sturzenegger, los responsables y firmantes del documento, un ajuste sólido y sostenido en la reducción del déficit fiscal, para lo que deberá ajustar fuertemente el gasto público, incluso por encima de las medidas ya anunciadas.

Lagarde exigió una reducción del déficit fiscal, la libre flotación del dólar, autonomía del Banco Central y metas inflacionarias reales.

A su vez, la libre flotación del dólar, una mejora en la autonomía del Banco Central y metas inflacionarias reales son las otras condiciones impuestas por el FMI, para garantizar el buen andar de una economía que ya enterró el gradualismo.

En esa misma línea, Dujovne anunció que el Ejecutivo presentará una modificación en la carta orgánica del Banco Central para garantizar y profundizar su autonomía. Además, Sturzenegger garantizó la libre flotación de la divisa norteamericana.

Durante la conferencia, el ministro de Hacienda se mostró "muy contento" por el acuerdo alcanzado ya que "nos va a facilitar el camino para reducir el déficit fiscal" y, de esta manera, se evitó "una crisis, que es lo que en Argentina ha destruido todo".

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