La Secretaría de Energía habilitó la aplicación desde el 1° de agosto de un incremento tarifario en el servicio de electricidad que responde a la llamada “reprogramación trimestral de invierno”, según publicó el Boletín Oficial.

La Resolución 612/2023 de la Secretaría liderada por Flavia Royón consideró “oportuno continuar con la reducción del subsidio al precio estacional de la energía eléctrica”.

El alza en la tarifa de luz regirá para los usuarios residenciales de altos ingresos, catalogados dentro del denominado “Nivel 1”, cuyo consumo mensual sea mayor a los 400 KWh, en orden con el proceso de disminución de los subsidios, orientado a fomentar la  “equidad distributiva y justicia social”.

No obstante, el texto oficial aclaró que “para el segmento Residencial Nivel 2 y Nivel 3 se mantienen vigentes los valores actuales”. 

La aplicación de la segmentación tarifaria es la estrategia que ha permitido al Gobierno ajustar los precios de la energía sin afectar a los consumidores de menores ingresos.

En lo que va del año, la electricidad aumentó en todo el país en febrero, mayo y agosto; y en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) sumó incrementos en abril y junio.

La Secretaría de Energía definió una quita total de subsidios para los usuarios de ingresos más altos, lo que implica que quienes tienen mayores recursos o no se inscribieron para recibir los subsidios no cuenten con el beneficio, que sí se mantiene para aquellos hogares con un consumo de 400 KWh o menos por mes y los de menores recursos.