El presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, reclamó este miércoles formalmente a la Comisión Disciplinaria de la FIFA que sancione a los responsables del escándalo que se desató sobre el final del partido en el que la Selección Sub 23 cayó ante Marruecos por 2-1 en su debut en los Juegos Olímpicos.

"Fue lamentable lo que nos tocó vivir a los argentinos en Saint-Étienne. Esperamos casi dos horas en el vestuario para que nuestros jugadores tengan que volver a salir y hacer la entrada en calor", consideró "Chiqui" en un comunicado difundido en sus redes sociales.

En este tono, Tapia hizo hincapié en la "violencia" que sufrieron los dirigidos por Javier Mascherano cuando, en tiempo agregado y tras marcar el 2-2, que finalmente fue anulado por el VAR dos horas después, los hinchas marroquíes invadieron el campo de juego.

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"Sumado a ello, tampoco se escuchó la opinión de los capitanes de ambos seleccionados, que entendían que el juego no se debía reanudar", añadió Tapia.

Unas horas antes, Mascherano declaró que pasaron "cosas raras" en el partido y denunció: "Ayer entraron al entrenamiento y nos robaron. A Thiago Almada le faltaba un reloj y anillos, no quisimos decir nada".

Al mismo tiempo, el técnico se refirió al gol anulado. "Estuvieron dos horas revisando una jugada en el VAR", señaló antes de indicar que, si bien fue correcta esa decisión, el objetivo fue "cortar el envión cuando faltaban tres minutos".

Desde Miami, Lionel Messi no fue ajeno al escándalo. "Insólito", escribió el rosarino en una historia de Instagram, que acompañó con un emoji. En la misma línea, el lateral Nicolás Tagliafico se sumó a las críticas, también desde sus redes sociales: "Saliendo del circo, ¿vamos a hablar del motivo por el que se suspendió o nos vamos a seguir haciendo los boludos? Si hubiese sido al revés, ni me imagino lo que estarían diciendo".