"Disfrutamos 80 y pico de minutos en los que fuimos muy superiores. Como dijo (Nicolás) Tagliafico, era para poner en un cuadro la final que hicimos. Después estar 2 a 2, yo entrando en calor, sufriendo mucho. De la nada dos goles. En el alargue, cuando te toca entrar lo vivís con más tranquilidad. Desde afuera es interminable el partido. Es un sufrimiento constante", el atacante del Inter de Italia.

Luego, tras el gol de Lionel Messi que significó el 3 a 2, confesó: "Yo por dentro pensaba ´Es nuestra, la llevamos´. En ese córner, dije ´Defendemos esta y ya es nuestra´, y vino el penal y se me vino todo abajo. Por suerte, tenemos un animalito en el arco, increíble. Fue una final soñada, sufrida, pero después se disfruta el doble".

Por otro lado, si bien el sufrimiento durante el partido fue enorme, el delantero contó que no se le hizo difícil la noche previa a la final: "Dormí muy bien. Hablé con mi familia, todo con mucha tranquilidad".

Y reveló, en diálogo con TyC Sports, que sí le costó conciliar el sueño antes de la final de la Copa América en 2021: "El único momento en el que recuerdo no haber dormido fue antes de la final frente a Brasil en el Maracaná. Ésa fue una de las pocas veces que me costó mucho dormir. En esta estaba muy tranquilo".

Posteriormente, Martínez admitió que en la final ante Francia le pidió el cuarto penal a Gonzalo Montiel y comentó: "En ese momento tenés que estar lo más tranquilo posible, pero se te pasan millones de cosas por la cabeza y el arco se hace una cajita de fósforos. Es normal".

Luego, quien era el encargado de patear el quinto disparo en caso de ser necesario, reconoció cómo y dónde lo hubiera ejecutado: "Si me tocaba a mí ya tenía decidido cómo patearlo. Iba a hacerlo fuerte y al medio, como pateaba mi viejo, porque no iba a arriesgar nada. Después es un poco de suerte, porque a veces el arquero se tira, la toca y entra igual".

Por otra parte, Martínez, que fue el encargado de sentenciar la serie de penales para definir los cuartos de final en un partido muy picante frente a Países Bajos, reveló detalles del cruce con los neerlandeses.

"Ya en la previa hablaron mucho, el entrenador y nada... La verdad que se hablaba mucho de nosotros, de como había pasado ese partido, donde supuestamente éramos nosotros los que estábamos cargando a ellos pero en la previa eran ellos los que habían hablado de más. Nosotros estábamos concentrando y habíamos visto las declaraciones", dijo sobre todas las críticas que recibió el plantel por lo sucedido.

Al referirse al enojo que generó en Messi estos dichos, el "Toro" con una sonrisa no dudó: "Para nosotros obvio que es importante eso, porque cuando se enoja (Messi) no hay para nadie o hay para todos...". Aunque después aclaró: "Quiero decir que no hay chances para nadie".

Sobre su definición ante los neerlandeses aseguró que fue muy importante para él a nivel personal: "Me dio un poco de alivio, de tranquilidad, un poquito más de confianza. Después no pude convertir en el Mundial más que ese penal, pero yo contento porque los compañeros que entraron, que les tocó, lo hicieron de la mejor manera y uno siempre desde su lugar trata de aportar lo mejor".

Por último, reveló cómo fue el momento de designar a los pateadores tras el 2 a 2 en los cuartos de final y para definir al semifinalista. "Nos reunimos, él (Scaloni) empezó a tirar nombres y yo obviamente le dije que quería patear. Uno es delantero y yo en el club pateo penales, en la Selección cuando no está Leo (Messi) y Lea (Paredes) que son los designados si había un penal lo tenía que patear yo, en Copa América pateé".

"Hicieron el orden y quedé quinto, por suerte Enzo erró y pude", sentenció entre risas.