Hace instantes terminó de declarar Marcela Acuña en medio de una huelga de hambre que lleva seis días. Según su abogado defensor, el costoso y prestigioso Juan Carlos Saife, aportó datos valiosos a la investigación durante tres horas. No contestó preguntas y desligó responsabilidades. Lo mismo había hecho ayer su esposo, Emerenciano Sena, pero por solo 15 minutos.

"Quisieron ganar tiempo" explicó una fuente judicial a Noticias Argentinas. Es que cuando Saife se enteró de que José Gustavo Obregón había hablado, intentó desviar la atención. Los tres tienen dos cosas en común. Todos fueron candidatos por la lista de Jorge Capitanich y los tres, según la Justicia, formaron parte del asesinato de Cecilia.

Obregón no dijo quién fue ni por qué pero dio señales claves de dónde se descartaron partes del cuerpo de la joven asesinada. Los resultados del rastrillaje de ayer fueron positivos.

Para fuentes de la investigación, Acuña la mató, Cesar participó y Emerenciano habría ofrecido de "carnicero". Obregón fue el encargado de tirar las partes del cuerpo junto con el novio de la víctima en la chancheria en Campo Rossi y en el arroyo lindante al barrio Emerenciano Sena.

La Justicia deberá peritar los huesos hallados y confirmar o no si se trata de Cecilia.