Dybala sí, Icardi no
Uno de los debates más interesantes sobre la lista de los 23 giró en torno a los delanteros que acompañarán a Leo Messi. Una tarea que hasta ahora no ha resultado sencilla. Gonzalo Higuaín, Sergio Agüero y Cristian Pavón tienen su boleto garantizado mientras que Diego Perotti se queda afuera de la nómina.
Los casos de Paulo Dybala y Mauro Icardi son muy similares, aunque el primero irá a Rusia y el otro deberá verlo por TV. Este año, en la Serie A, apenas Ciro Immobile, de Lazio, marcó más goles que alguno de ellos. Sus 29 goles superaron los 28 del capitán del Inter y los 22 del delantero de Juventus.
A continuación, analizaremos por qué Sampaoli convocará a Dybala y dejará con las ganas a Icardi.
DYBALA
Si bien nunca se confirmó, las declaraciones de Dybala (ndr: comentó que era difícil jugar con Messi) parecieron poner en jaque sus posibilidades de ir al Mundial. A partir de ese momento (septiembre de 2017), el delantero de la Juventus jugó poco y nada en los partidos de Argentina, y cuando le tocó estar no logró cambiar el rumbo de una Selección que estuvo a centímetros del naufragio.
La parte final de la temporada del goleador de la Juventus no fue la esperada: a pesar de sus 22 goles en la Serie A, en ocasiones debió ver los partidos desde el banco de suplentes y fue muy cuestionado tras su expulsión en el partido de ida de los cuartos de final de la Champions League, ante el Real Madrid.
Más allá de todo, Sampaoli sabe que Dybala tiene una calidad que no encuentra en otros jugadores argentinos. Es más que una buena alternativa para ingresar desde el banco y revolucionar el ataque, en caso que el desenlace del partido así lo pida. La incógnita es si el DT se animará a juntarlo con Messi, o si será su reemplazante natural.
ICARDI
Su posible convocatoria durante las Eliminatorias fue el eje de infinidad de debates. Con Gonzalo Higuaín y Sergio Aguero más afuera que adentro de las convocatorias, Argentina tuvo una de las clasificaciones más pobres, ofensivamente hablando: los 19 goles anotados son muestra más que contundente.
En agosto de 2017, cediendo ante el clamor popular, Sampaoli convocó a Icardi para los partidos con Uruguay y Venezuela. Con todo a favor, el saldo para el delantero fue negativo ya que tuvo varias chances de convertir ( sobre todo ante los venezolanos, de local) pero por x o por y la pelota no entró. Fue en ese momento cuando Icardi perdió la pulseada y, si bien públicamente siempre manifestó su amor por la celeste y blanca, se dio cuenta que el Mundial lo iba a ver desde afuera.
Icardi tendrá en el futuro inmediato las oportunidades para ser el 9 de la Selección si sigue mandando mensajes adentro de la cancha. Talento le sobra.