"Tía Iva”, la revancha de las mujeres en el Mundial
Iva Olivari se abraza a sus compañeros muerta de nervios. Croacia se está jugando el pase a cuartos de final contra Dinamarca por penales. Mientras tanto, en Twitter comparten fotos de la presidenta de Croacia en malla, y es tendencia por su figura voluptuosa.
"Me dicen que no sé de fútbol, que sería mejor si mi lugar lo tuviese un varón, pero sus comentarios me dan igual”. Olivari se puso los pantalones, o la pollera, de la selección croata a la hora de echar al jugador Nikola Kalinic cuando el Mundial recién empezaba, porque se negó a entrar a jugar en el partido contra Nigeria, y tenía una mala relación con el plantel. Es la mánager de su Selección. La Jefa de Equipo.
Y más allá de que Croacia esté haciendo historia por jugar una final del mundo, ella está tejiendo otro trazo en este largo camino de igualdad entre varones y mujeres: es la primera mujer en integrar el cuerpo técnico de un seleccionado.
Croacia tiene más figuras que Modric, y una de ellas, no pone el pie de la línea de cal para adentro. A diferencia de los jugadores estrella, Iva Olivari es figura a su pesar. Ella quisiera pasar desapercibida entre el tumulto de su equipo y de sus compañeros. Pero no solo es la única mujer que integra un plantel, también es la primera en hacerlo en la historia de los mundiales.
Olivari elige #girlpower y #womeninfootball como los pie de sus fotos en Instagram; esas que les sacan los fotógrafos cuando delinea su libreta y Rakitic mueve la pelota adentro de la cancha. Ella sabe que está dando un primer paso, por ahora incipiente, de lo que puede convertirse en una avalancha.
Conversa con sus compañeros, festeja y está atenta a cada jugada. Saca selfies en el vestuario y la abrazan. "Es nuestro ángel de la guarda, todos la queremos mucho”, destacó Subasic después de ganarle a Dinamarca por penales. Los jugadores la apodaron "Tía Iva” por su carácter de consejera.
A los 14 años, fue campeona de tenis femenino en la antigua Yugoslavia. Su carrera ostenta un triunfo ante Steffi Graf, ex número uno del mundo. La misma lesión que sufrió Del Potro en la muñeca la echó de ese mundo y ahora, a los 49, el fútbol le dio revancha en el deporte.
Olivari desembarcó en la Selección en 1992, un año después de que Croacia se independice de Yugoslavia, y la FIFA la admitió como integrante. Davor Suker, el presidente todavía hoy de la Federación, le dio el puesto de mánager.
Ella organiza los viajes, entrenamientos y partidos, y fue la que presentó el búnker en la ciudad de Roschino como base croata para el Mundial, a 70 kilómetros de San Petersburgo. Se jactó de ser "la reina de los papeles”: coordina logística, hospedajes y la comunicación con la FIFA.
Su debut en el banco de suplentes fue en la Eurocopa 2016, antes veía los partidos desde la tribuna. No se siente tan sola en este Mundial: en la platea, al lado de Infantino, alentó a la selección croata la presidenta del país, Kolinda Grabar-Kitarovic, que en marzo de este año le guiñó el ojo a las mujeres argentinas cuando estuvo de visita, declarándose a favor de la legalización del aborto. En Croacia, el aborto legal data de 1978.
Los diarios, en el erróneo afán de enaltecer su figura, la definen como "el secreto de la Selección de Croacia”. Ella no es secreto, no quiere que la mencionen por lo bajo. Sí es curiosidad y figura por ser la pionera y abrir caminos, pero si pudiera elegir, preferiría ser una más, como todos los demás.
"Los chicos son fantásticos, los quiero un montón”, dijo de todos sus compañeros. Mientras tanto, "Tía Iva” prepara la final del mundo contra Francia, y del otro lado, las futboleras nos entusiasmamos con ver a una mujer levantando por primera vez la Copa.