De acuerdo con el decreto, los vuelos no serán para turismo y sólo estarán habilitados a realizarlos aquellos trabajadores considerados esenciales y quienes tengan que efectuar algún tipo de tratamiento médico, aunque también faculta a la Jefatura de Gabinete a aplicar excepciones.

Según la disposición, que lleva el número 792, se extiende la habilitación del "transporte público interurbano e interjurisdiccional" a los trabajadores esenciales y a aquellos pasajeros que deban ser trasladados por motivos sanitarios, junto con sus acompañantes.

El titular del Ministerio de Transporte, Mario Meoni, iniciará consultas con los gobernadores para determinar qué destinos estarán habilitados para los viajes. Incluso, la normativa permite a las provincias efectuar algún tipo de objeciones para evitar la llegada de aviones, lo cual también será tenido en cuenta a la hora de autorizar los vuelos.  Se buscará que la mayor cantidad de provincias retomen la regularidad, siempre con los pasajeros establecidos por el decreto, aclararon.

Además de esas consultas, está pendiente la firma de otras resoluciones técnicas y administrativas no sólo del Ministerio sino también de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), aunque se descarta que serán tomadas en lo inmediato. La última palabra la tendrá el Ministerio de Salud en cuanto a situación epidemiológica.

Desde Transporte aspiran a que el fin de semana ya se pueda estar volando con vuelos regulares.  A nivel local, antes de que se desatara la pandemia, las empresas habilitadas para realizar vuelos de cabotaje eran Aerolíneas, Austral, LATAM, Andes, Flybondi, Norwegian y JetSmart, pero ya en junio LATAM decidió cancelar definitivamente su operatoria en el país.

Los vuelos de cabotaje no podrán realizarse por lo que resta del año desde el Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery, cuya pista está siendo refaccionada, por lo que en principio operarían con el aeropuerto de Ezeiza como cabecera.