Bridgerton: por qué somos adictos a la serie de Netflix y qué sabemos sobre la segunda temporada
El drama de época del sello Shondaland está entre las diez producciones más vistas de la plataforma.
Últimamente todos estamos hablando de los Bridgerton, la familia de aristócratas de la Regencia que se centra en su hija mayor Daphne, a quien le toca introducirse en el despiadado mercado matrimonial londinense para elegir marido y cumplir con las normas y protocolos de la época.
En esta suerte de Orgullo y Prejuicio cruzado con Gossip Girl, la serie es un culebrón hermoso con sexo y romance del bueno y la tiene a Julie Andrews como narradora de los episodios. ¿Qué más podríamos pedir?
Los obstáculos que impiden que el duque de Hastings y la joven Daphne puedan terminar juntos es lo que hace avanzar la trama de esta primera temporada, pero también se nos introduce a los otros integrantes de la familia y a sus propios conflictos políticos y amorosos.
Te contamos lo que nos gustó de una serie que consigue transportarnos a ese universo rococó sin caer en el melodrama.
La tierra de Shonda:
Muchos de nosotros llegamos a Bridgerton cuando descubrimos quién estaba detrás de todo esto. Shonda Rhimes es la creadora de las exitosísimas Grey’s Anatomy y Scandal y es productora ejecutiva de How To Get Away With Murder. Podemos criticar la extensión eterna de sus series (Grey’s va por la temporada 17) pero si hay algo que no podemos negar, es su talento para la construcción de universos. Ya sea en el hospital de Seatle Grace o en la mismísima Casa Blanca, sus producciones logran introducir personajes de los que nos enamoramos casi desde el primer momento. Queremos verlos triunfar, lloramos cuando la pasan mal y nos alegramos por sus victorias. Y esto no es algo fácil de conseguir, sobre todo cuando se abarcan muchas subtramas dentro de una misma narrativa (y sino recuerden el fallido desarrollo de personajes en The Walking Dead).
En Bridgerton, Shonda lo hizo otra vez, porque aunque el foco está puesto en lo que pasa con Daphne y el duque, también necesitamos saber quién es Lady Whistledown, qué pasa con Anthony y Eloise y qué onda la situación económica de los Featherington.
Por otro lado, Grey's y Scandal tienen algunas de las mejores escenas de besos en series que hay dando vueltas por ahí y en este drama de época tampoco faltarán las secuencias que reflejan despertares sexuales, la electricidad entre los protagonistas y los deseos ocultos de la fruta prohibida.
Si bien todos escuchamos hablar de Shonda, Chris Van Dusen fue quien estuvo detrás de esta magia después de haber formado parte del programa médico entre el 2005 y el 2012 y de su spin-off, Private Practice.
El cast y sus personajes: Phoebe Dynevor y Regé-Jean Page
Al igual que ocurrió con Normal People, los actores protagonistas no eran demasiado conocidos antes de interpretar a Simon y a Daphne en la nueva creación de Shonda.
En estos casos, la tensión sexual y la conexión entre los personajes tiene que ser lo que sostiene la trama: Si no nos la creemos, la historia se cae.
Recordemos el caso de 50 Sombras, en donde a pesar de que ahí nada funciona, además era notoria la ausencia de química entre Jamie Dornan (Mr.Grey) y Dakota Johnson (Anastasia).
De hecho, estos actores contaron con un coordinador de intimidad en el set para coreografiar las secuencias de intimidad de la mejor manera posible y hacerlas sentir verosímiles.
Por su parte, Phoebe parece hecha a medida de este cuento de hadas: sus facciones, expresiones y movimientos corporales son perfectos para el retrato de una joven que creció en una burbuja y que está dispuesta a aprender y a vivir nuevas experiencias como la nueva duquesa.
Destacamos también las licencias que se permite con la incorporación de un reparto inclusivo a pesar de que la acción ocurra en la Londres del siglo XIX. Un gran acierto que nos recuerda al que se vio recientemente con Hamilton en la puesta del musical de época que se estrenó en Disney Plus.
Sin dudas, lo mejor de la apuesta de Netflix es que se trata de una serie que no es pretenciosa. Sabe lo que es y lo que quiere hacer y juega con eso sin meterse en conflictos absurdos ni enroscarse en el aspecto histórico de la trama. Y lo más importante es que el espectador entiende el tono y sabe qué debe esperar de la serie.
Bridgerton llegó como una bendición navideña dinámica, sexy y atrapante de la que queremos seguir viendo más. Shonda lo hizo de nuevo.
Segunda temporada
Aunque todavía no hubo un anuncio oficial de Netflix, todo indicaría que tendríamos una segunda temporada.
Recordemos que la primera se basó en el libro titulado The Duke and I, y la próxima entrega debería seguir los eventos de The Viscount Who Loved Me (El vizconde que me amó), que pone el foco en el hermano mayor Anthony Bridgerton, y lo que ocurrió después de que perdiera al amor de su vida.
Ojo que podríamos tener Bridgerton para rato, porque todavía quedan por adaptar siete de los ocho libros de la saga homónima de Julia Quinn. ¿Tendremos un fenómeno a lo Grey’s Anatomy?
Según Production Weekly la temporada 2 comenzará a filmarse en Uxbridge, Inglaterra, en marzo de 2021. Habrá que esperar un poco más para tener novedades pero el panorama es súper alentador.