La muerte de Sergio Varisco puso nuevamente de relieve los antecedentes en la Justicia del exintendente de Paraná. El episodio más resonante que afrontó en tribunales tuvo que ver con el narcotráfico en el 2019. Esto significó un escándalo para el espacio liderado por Mauricio Macri.

Varisco tenía 60 años y murió este jueves en la clínica privada Modelo de la capital entrerriana, luego de permanecer 15 días internado con una neumonía aguda y tras haber sido sometido a una cirugía neurológica compleja.

El paranaense nació el 10 de julio de 1960 y tenía una hija, Lucía, con Ilbe Malisani. Empezó a militar desde muy joven en la Unión Cívica Radical (UCR), cuando en el país había irrumpido la última dictadura militar.

El dirigente fue diputado nacional desde el 2005 al 2009, pero también gobernó su ciudad natal en dos períodos: desde 1999 a 2003, en representación de la UCR, y desde 2015 a 2019 con Cambiemos. Luego buscó la reelección en 2019, pero fue derrotado. Lo mismo le sucedió en 2003 cuando compitió por la gobernación de Entre Ríos y perdió frente al candidato del justicialismo, Jorge Busti.

La Universidad Nacional del Litoral lo recibió para estudiar las carreras de Derecho y Matemática Aplicada, pero no las finalizó.

El exintendente provenía de una familia muy ligada a la política: su padre fue dos veces jefe comunal de Paraná (1983-1987 y 1995-1999) y su madre fue secretaria de Cultura municipal desde 2015 a 2019. Mientras que su hija tuvo cargos en la comuna y, actualmente, es diputada provincial.

El 20 de diciembre de 2003 Varisco tuvo un accidente con el Volkswagen Gol en el que viajaba junto a la exconcejala radical de Paraná Mercedes Lescano. Producto de un choque con la rueda delantera de un camión Scania, la mujer murió luego de haber estado varias horas en coma. Por ese hecho, el exjefe comunal fue condenado por el delito de “homicidio culposo” y tuvo que realizar tareas en una ONG, participar de una charla de concientización vial y pagar $10.000 a la querella.

En 2020, Varisco y su pareja, la concejala Claudia Acevedo, lograron suspender un juicio por conexión clandestina de electricidad en su vivienda. El exintendente acordó pagar el 15% de su salario de asesor de su mujer, al igual que Acevedo, pero ninguno reconoció el delito.

En 2019 el dirigente radical fue condenado a seis meses y medio de prisión por comercialización de estupefacientes, y acusado de financiar el narcotráfico a través del municipio. La pena la cumplió en prisión domiciliaria.

El suceso despertó la polémica en la capital entrerriana. Desde el macrismo no hubo ninguna manifestación de repudio: optó por considerarlo un hecho aislado y lejano. La coalición focalizó su atención en las elecciones de ese año y en los números de las encuestas, que lo mostraban varios puntos por detrás del kirchnerismo. Además, la economía estaba muy resentida como para dar lugar a más problemas. Pero la imagen de Cambiemos quedó afectada.