Quién era Jorge Brito, el engranaje del poder de los últimos 20 años
El banquero más importante de la Argentina falleció hoy a sus 68 años. Fue una figura clave en la vida nacional.
Su última aparición pública había sido hace apenas cuatro días, cuando expresó su rechazo de plano al proyecto de impuesto a las grandes fortunas que horas después vería luz verde en la Cámara de Diputados. "La creación de este tributo sólo agrega más elementos a aquellos que quieren irse del país", alertó.
Este viernes, el presidente del Banco Macro, Jorge Brito, perdió la vida a sus 68 añis luego de que se precipitara un helicóptero que lo trasladaba, en la Salta, dentro del perímetro del Embalse Cabra Corral. El banquero más importante de la Argentina volvía de un almuerzo con el gobernador de la provincia, Gustavo Sáenz.
Los orígenes al frente del Macro
Nacido en la Ciudad de Buenos Aires, comenzó a trabajar meses antes de cumplir la mayoría de edad y desde la época de la dictadura militar se convirtió en uno de los máximos referentes del empresariado dentro de la Argentina y la región sudamericana, con participación en la actividad bancaria, inmobiliaria, agropecuaria y energética.
En el año 1976, junto a su cuñado Delfín Jorge Ezequiel Carballo creó la compañía financiera Hamburgo, y apenas un año después realizó grandes ganancias gracias a la reforma financiera. En los 80´, Brito mantuvo una buena relación con el gobierno de Ricardo Alfonsín, a través de Enrique "Coti" Nosiglia, con quién mantendría el vínculo durante las décadas posteriores. Luego de adquirir en 1985 Macro Cía. Financiera S.A, en 1987 recibió la autorización del Banco Central para iniciar sus operaciones como Banco Macro.
En la década del '90, en el marco de las privatizaciones que lanzó el entonces presidente Carlos Menem, se lanzó a licitar bancos provinciales públicos y en 1996, el Macro fue la única entidad bancaria que se presentó a la licitación del Banco de Salta, provincia donde mantuvo una posición predominante.
La expansión y el vínculo con el poder
A finales de ese decenio, firmó un convenio con la administración provincial salteña para que su banco se constituyera en el agente financiero del distrito por 10 años. Ese acuerdo fue renovado por otra década en el primer mandato del exgobernador Juan Manuel Urtubey. De esa forma, tuvo un lugar destacado la gestión de los fondos del presupuesto de la provincia y la coparticipación federal.
Esa misma ecuación hilvanó en las provincias de Misiones y Jujuy, donde se fusionó con los bancos provinciales a cambio de controlar las cuentas oficiales como agente financiero. Incluso, en la provincia de la Mesopotamia se transformó en agente de recaudación de sus rentas y la atención de órdenes de pago de sus obligaciones, un estatus que el Banco Macro mantuvo hasta diciembre del 2019.
Durante los 90, Macro pasó de ocho a 65 las sucursales a nivel nacional y apenas días antes de que Fernando De la Rúa decretara el estado de sitio compró el Bansud. En agosto de 2002, absorbió al Scotiabank Quilmes y añadió 36 sucursales más del banco en el interior.
En las últimas dos décadas, Brito consolidó su posición al alcanzar la presidencia de ADEBA (Asociación de Bancos Argentinos) y registrar ganancias por U$S 62 millones a más de U$S 300 millones entre 2003 y 2012.
A lo largo de su vida, incursionó en la actividad inmobiliaria al adquirir la empresa Vizora (tuvo fuerte injerencia en el desarrollo de Puerto Madero); en la ganadera, al hacerse con las acciones de Inversora Juramento S.A (aumentó en 36% su valuación en dólares con el gobierno de Macri), Frigorífico Bermejo S.A y Cabaña Juramento S.A; y en la actividad energética, al tomar el mando de Genneia S.A, que se transformó en la principal inversora en energías renovables de la Argentina.
Además de la fortuna que edificó con su holding, se desempeñó como titular de la FELABAN (Federación Latinoamericana de Bancos) entre 2012 y 2014 y fue miembro del grupo de los 6 bancos más importantes que operan en el país. Construyó una numerosa familia con Marcela Carballo, con quien tuvo seis hijos: Milagros, Jorge, Marcos, Constanza, Santiago y Mateo.
Brito mantuvo una relación permanente con los gobiernos y la política durante las últimas cuatro décadas. La crítica al oficialismo por el Aporte Solidario no significa que no tuviera afinidad con distintos sectores del actual gobierno, como el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y con referentes de la oposición. No obstante, el banquero supo también enfrentarse con el exmandatario Mauricio Macri cuando se lo intentó involucrar en la causa de los Cuadernos.
Así, el fallecimiento sorpresivo del presidente del Macro significa el fin de uno de los principales engranajes del poder en nuestro país en los últimos 20 años.