Este 1 de marzo de 2022, el presidente Alberto Fernández dio inicio por tercera vez en su mandato a las sesiones ordinarias del Congreso de la Nación. El acto se produce en medio de una tensa situación global y también hacia dentro de las filas del Frente de Todos (FDT). Con tres contextos muy disímiles entre sí, el jefe de Estado presenta una vez más en el recinto de la Cámara de Diputados los objetivos para el año vigente y la defensa de la gestión nacional hasta el momento.

2020. A tres meses de haber asumido, Fernández protagonizó un evento institucional que hasta entonces solo había presenciado desde los palcos parlamentarios. En ese entonces, el mandatario llegaba a la Casa Rosada luego de dos años de crisis económica sostenida, recambio de signo político en el Gobierno y la expectativa depositada por parte del amplio arco peronista en un nuevo Frente que aglutinó a todos los sectores del movimiento. En aquel momento, la pandemia todavía no había llegado a la Argentina y, en tanto, el presidente priorizó temas referidos a la recuperación económica, la lucha contra el hambre, el aborto, la "limpieza" de la Justicia y los servicios de inteligencia. Un discurso casi a agenda abierta y con numerosas promesas para un mandato que recién comenzaba, tenía cuatro años por delante y un imprevisto determinante.

2021. Doce meses después, muchos de esos objetivos se vieron obstaculizados por la propagación del COVID-19 en el mundo y su impacto en el país en particular. En el proceso, la imagen positiva del jefe de Estado creció a niveles históricos por el combate contra el coronavirus y volvió a caer tras un año de desgaste de gestión. En ese marco, Fernández buscó aferrarse a la salida de una pandemia que aún no había mostrado sus consecuentes ‘nuevas’ olas, mantuvo un tono más confrontativo hacia la Justicia y anunció que iniciaría una querella criminal para investigar la emisión de deuda externa por parte del macrismo. Además, celebró los logros de sus primeros 365 días: la sanción del aborto legal, la renegociación con los acreedores privados, la respuesta sanitaria frente a a pandemia y la adquisición de las primeras vacunas.

2022. Este año, promediando el mandato de su gestión, Fernández brinda su discurso en un contexto conflictuado tanto a nivel internacional –por la invasión de Rusia a Ucrania y su confrontación con la OTAN– como a nivel nacional –por una relación tensa con la oposición que, con una presencia parlamentaria más fuerte, complicó la aprobación de algunos proyectos clave del Gobierno como el Presupuesto 2022–. Además, la presentación del jefe de Estado se da a meses de la derrota en las elecciones legislativas del año precedente y en el marco de importantes incendios en la provincia de Corrientes y de un inminente cierre de negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en un programa que definirá la política económica de la próxima década.