Desde Israel, Axel Kicillof recibió la primera derrota financiera de su gobierno. Los bonistas rechazaron la primera propuesta de la Provincia para refinanciar la deuda.

Lejos de quedarse de brazos cruzados, el Gobernador emitió directivas para su ministro de Hacienda, Pablo López, para extender el plazo de negociación hasta el 31 de enero. Con esta prórroga, la Provincia tiene diez días para ofrecer una nueva oferta en el pago de los bonos BP 2021, que cuentan con un vencimiento de 250 millones de dólares.

Si en ese plazo la oferta no es aceptada, la Provincia entraría en default. Según el economista Marcelo Elizondo, esa circunstancia podría afectar, también, a la negociación de Nación con el Fondo Monetario Internacional.

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El "consejo" de las consultoras

López aseguró que el rechazo sería perjudicial para los propios bonistas. El ministro de Hacienda bonaerense -quien también era secretario de Finanzas de Nación cuando Kicillof decretó el default a los fondos buitres- indicó que “el rechazo del mercado al diferimiento propuesto resultaría en mayores daños a la economía bonaerense y pérdidas para los inversores”.

Las consultoras, por caso, recomendaron a los bonistas aceptar el combo que ofrece Kicillof: pago de interés y suspensión del pago de capital hasta mayo.

"Creo que a los acreedores no les va a quedar otra opción que aceptar la propuesta de Kicillof. En el fondo, no es tan extenso el plazo que les están pidiendo. Peor sería forzar el default. Lo que ocurre es que las dos partes están jugando al poker: cada uno se quiere mostrar duro porque quiere que el otro se asuste primero”, describió, ante el diario El Economista, Miguel Zielonka, director asociado de la consultora Econviews.

Kicillof y el FMI
Kicillof y el FMI

"Frente a esta postura, se generó una caída muy fuerte en precios de los bonos, consistente con un aumento en la probabilidad de default implícita, que paradójicamente es lo que se requiere para que los acreedores privados frente a la probabilidad de default y la no expectativa de un auxilio financiero es lo que necesitan los acreedores para empezar a tener incentivo y tener una negociación mediante las CAC (Cláusulas de Acción Colectiva) y así evitar el default”, explicó Federico Furiase, de EcoGo.

“Para que los acreedores negocien y acepten el reperfilamiento mediante las CAC, necesitan estar convencidos de que no habrá salvataje financiero si no se alcanza la negociación. Probablemente, todavía haya dudas, más allá de lo que viene ocurriendo”, completó.