Cuando parecía que las discusiones tarifarias entre el jefe del Palacio de Hacienda, Martín Guzmán, y su subsecretario Federico Basualdo podían diluirse, un proyecto que se comenzó a debatir en el Senado reavivó la disputa en el oficialismo.

Legisladores cristinistas impulsaron en la Cámara Alta una iniciativa para limitar el uso de los más de 4 mil millones de dólares que prevé enviar al país el FMI con el fin de paliar los efectos de la pandemia y como parte del incremento en los Derechos Especiales de Giro (DEG).

El proyecto fue promovido principalmente por Oscar Parrilli, hombre de extrema confianza de la vicepresidenta Cristina Kirchner, y acompañado por la bancada oficialista.

“Estamos haciendo lo que corresponde a un Gobierno que entiende que resolver un problema de deuda no es la decisión ni de un presidente ni de un ministro solo, es del pueblo argentino a través de sus representantes, que en una parte somos nosotros", enfatizó Parrilli durante el debate sobre el proyecto en la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado.

La iniciativa busca que el dinero del FMI sea destinado a "salud, reducción de la pobreza, educación, vivienda, generación de trabajo, entre otros, y no al pago de la deuda por capital, intereses o gastos, que el país mantiene con dicho organismo financiero internacional y/o con otros países englobados en el Club de París".

El ministro de Economía, entre otros destinos que brindaría a los fondos, tiene el foco puesto en las alicaídas arcas del Banco Central, por lo que su margen de maniobra para equilibrar las finanzas del país se vería amenazado por el proyecto cristinista.

En medio del nuevo capítulo de la interna en el Frente de Todos, Guzmán recibió el respaldo en las negociaciones con el FMI del mismísimo organismo multilateral.

Lo hizo el vocero del Fondo Monetario, Gerry Rice, al ser consultado en una conferencia de prensa en Washington sobre las dificultades de Guzmán para aplicar su programa económico, en especial el recorte de subsidios a la energía y la reducción del gasto público.

"Estamos muy comprometidos en estas discusiones con el ministro Guzmán, es nuestra contraparte en las conversaciones y no voy a hacer especulaciones sobre este punto", dijo el portavoz del Fondo Monetario.

Legisladores demócratas de Estados Unidos solicitaron que el FMI suspenda el cobro a Argentina de "todos los servicios de la deuda" durante la pandemia.

Lo hicieron a través de un proyecto de resolución presentado en la Cámara de Representantes del país norteamericano, solicitando a la Casa Blanca que lo exija al Fondo.

La iniciativa surge así luego de las gestiones en ese sentido llevadas a cabo por el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de esa Cámara, Gregory Meeks, y el titular de Diputados en Argentina, Sergio Massa, en lo que ya se conoce como “El Puente Queens-Tigre”.