Una jueza de la Ciudad de Buenos Aires amargó -al menos por ahora- los planes que Daniel Angelici tenía para el Campito de Casa Amarilla, un terreno que estaba destinado en sus inicios a viviendas sociales, pero luego fue vendido a Boca Juniors por el Gobierno porteño de Horacio Rodríguez Larreta.

A mediados de enero, el club que dirige el poderoso Angelici había enrejado la manzana delimitada por las calles 20 de septiembre, Martín Rodríguez, Juan Manuel Blanes y Palos, a pesar de que hay una causa judicial donde se intenta dilucidar si la venta del espacio público fue legal.

Tal como contó ElCanciller, la movida de enrejar el terreno pudo hacerse debido a que, a fines de diciembre, el juez Guillermo Scheibler fue apartado de la causa por la Cámara en lo Contencioso de la Ciudad. Ese fue el magistrado que le ordenó a Boca que se abstuviera de hacer cualquier cosa en ese lugar hasta que se definiera la causa.

Ahora, después de un pedido de la querella La Boca Resiste y Propone, la nueva jueza de la causa dictó una cautelar donde se suspenden “todos los efectos jurídicos” de la resolución que aprobó el llamado a licitación pública de los predios de Casa Amarilla.

Es decir, la decisión de Paola Cabezas Cescato automáticamente da de baja todo lo que se haya hecho en el terrero hasta que se dicte la sentencia definitiva que establezca si la licitación y posterior compra del terreno por parte del club xeneize se realizó dentro del marco de la ley.

La jueza Paola Cabezas Cescato anuló todo hasta que se dicte sentencia definitiva que esclarezca si la venta del espacio público fue legal.

Originalmente, el Campito de Casa Amarilla estaba destinado a viviendas sociales, ya que pertenecía al Instituto de la Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires, el organismo que se encarga de la política habitacional. Hace tres años, el IVC transfirió el terreno a la Corporación del Sur, que los puso en venta.

La licitación fue hecha a medida de Boca: los fondos que se pedían, la antigüedad en el barrio y la cantidad de socios hicieron imposible que cualquier otra organización pudiera disputar los terrenos. En abril de 2016, la Comisión Directiva del club aprobó la compra por 180 millones de pesos.

¿Qué es lo que quiere hacer Boca en el predio?

Días después de enrejarlo, el club presentó su plan “espacio multicultural y deportivo”. Al principio, se había especulado con la construcción de un nuevo estadio que reemplazaría a la Bombonera, pero, al final, el camino elegido fue otro.

Según el proyecto de Angelici, unos 14.500 metros cuadrados serán dedicados a canchas de fútbol, basquet y un circuito de bicicletas y skate. Otros 13 mil metros cuadrados serán para “actividades sociales” y el resto, unos mil metros, serán cubiertos para instalar un gimnasio y un museo.