Tal como se preveía, el Gobierno mostró su número de oro. Esta tarde, Mauricio Macri reveló que en 2017 la pobreza disminuyó del 30,3% al 25,7%, un verdadero triunfo que se destacó teniendo en cuenta que durante la gestión anterior estas métricas no se medían.

Junto a los ministros de Educación, Alejandro Finocchiaro; de Desarrollo Social, Carolina Stanley; de Trabajo, Jorge Triaca, y el titular de la Anses, Emilio Basavilbaso, Macri basó esta conquista en el crecimiento y el progreso de otros indicadores como el trabajo, la actividad, la inversión y el consumo.

La reducción del 4,6% durante el año pasado se traduce en 1.900.000 personas que escaparon de la línea de la pobreza, configurando un nuevo esquema nacional: al momento de asumir Cambiemos se estimaba que 1 de cada 3 argentinos no podían acceder a la canasta básica total, mientras que ahora eso redujo a 1 de cada 4.

Desde que el INDEC recuperó la serie de pobreza que se había dejado de realizar y publicar, el Gobierno consiguió que alrededor de 2 millones 700 mil personas dejaran de ser pobres, mientras que la indigencia también se redujo de manera significativa: disminuyó un 1,5%, es decir 610 mil personas salieron de la indigencia.

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Este triunfo para Macri y Cambiemos llega para aliviar y encarar con holgura un año no electoral al que todavía le resta la segunda parte de los tarifazos y el tratamiento de la reforma laboral en el Congreso. Luego de muchas pálidas (reforma previsional, Submarino ARA San Juan, inflación irremontable, off shores de Caputo), finalmente, la Casa Rosada retoma el control de la agenda de buenas noticias.