El oficialismo logró este jueves emitir dictamen de mayoría a la nueva versión de la Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos tras debatirla en un plenario de las comisiones de Legislación General, Presupuesto y Hacienda y Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, por lo que la iniciativa será tratada en el recinto en una sesión programada para los próximos lunes 29 y martes 30 de abril.

Horas después, también logró "pasar al recinto" para ser discutido en paralelo con la Ley Bases el denominado "paquete fiscal", que consiguió ser dictaminado en una reunión en solitario de la comisión de Presupuesto, que preside José Luis Espert.

Pasadas las 15:30, La Libertad Avanza cosechó 61 firmas entre legisladores propios, del PRO y un sector mayoritario de la Unión Cívica Radical (UCR) y Hacemos Coalición Federal para dictaminar la Ley Bases.

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Dentro de este último bloque, los cinco integrantes de la Coalición Cívica emitieron su propio dictamen de minoría, al igual que los dos socialistas santafesinos (Mónica Fein y Esteban Paulón) y Margarita Stolbizer. Por su parte, Unión por la Patria y el Frente de Izquierda presentaron dictámenes de rechazo.

La iniciativa logró su paso al recinto gracias a negociaciones de último momento, en las que el oficialismo cedió y, con parte de la oposición, acordó sacar al Banco Nación de la nómina de empresas a privatizar.

Esta exclusión se dio en paralelo al anuncio de la presentación de un proyecto firmado por los diputados Sergio Palazzo y Carlos Cisneros que proponía establecer a la entidad bancaria como "propiedad del Estado Nacional" y exceptuarla del proceso de privatización, al igual que todas las compañías del Grupo Nación.

Pese a lograr la emisión del dictamen, el recorrido de la propuesta hasta acá no fue sencillo y en las últimas horas habían surgido frentes inesperados de conflicto a partir de diferencias entre los tres principales bloques de la oposición con los que el Ejecutivo viene conversando. 

Justamente fueron la reincorporación de los impuestos internos al tabaco y la reforma laboral los dos focos que dividieron a estos partidos, lo que generó un clima tenso en los pasillos de la Cámara baja. En este sentido, el Gobierno aceptó incorporar ambos temas a la iniciativa y tomó como base la propuesta del radicalismo. El PRO, que había acercado su propio borrador, similar al del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) frenado en la Justicia, protestó por el protagonismo que le estaban dando al centenario partido en las negociaciones, según consignó la agencia Noticias Argentinas.

A las 16, en tanto, dio comienzo el trabajo de la comisión presidida por Espert para dictaminar el "paquete fiscal", conocido formalmente como Ley de Medidas Fiscales, Paliativas y Relevantes.

Sobre 49 diputados presentes, el oficialismo obtuvo 27 rúbricas con la ayuda del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal. Este último bloque firmó en disidencia parcial, mientras que Unión por la Patria presentó un dictamen de minoría. 

Uno de los temas más destacados de la iniciativa es la reposición de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias, rebautizado como Impuesto a los Ingresos Personales.

Luego de varias instancias de negociación entre el Gobierno, las provincias y los bloques de la oposición dialoguista, se definió que el mínimo no imponible estará ubicado en $1.800.000 para trabajadores solteros y en $2.200.000 para casados con hijos. De esta manera, volverán a estar alcanzados por este tributo casi un millón de personas.

La actualización del mínimo no imponible y del piso de cada una de las escalas se realizará de forma semestral a partir del 2025, aunque este año habrá un ajuste trimestral en septiembre, en base al índice de inflación.