Este lunes el Gobierno decretó, en el Boletín Oficial, la revisión de los terrenos cedidos por el Ejecutivo nacional a la Ciudad de Buenos Aires desde 2018.

La intención de Alberto Fernández es fiscalizar la cesión de 31 inmuebles que pasaron a manos del gobierno porteño, en tiempos en que Mauricio Macri comandaba la Casa Rosada. "El objetivo es lindar responsabilidades administrativas, civiles o penales, ante la detección de vicios que puedan implicar su nulidad", así como "eventuales hechos o actos ilícitos", expresa el documento publicado en el Decreto 149/2020.

El total de la transferencia de terrenos se calcula en más de $16.000 millones de dólares. Desde el Gobierno de la Ciudad aseguran que el Estado nacional -mediante la Agencia de Administración de Bienes del Estado-  había acordado ceder bienes al Ejecutivo porteño, durante noviembre de 2018. La intención era reemplazar los fondos prometidos para obras públicas. Por caso citan el ejemplo del Paseo del Bajo, que terminó con la financiación exclusiva de la caja porteña.

A su vez, en la Jefatura de Gobierno explican que el plazo de los traspasos se fueron demorando. Y citan el fin de de la gestión de Macri como la última transferencia. Según explicó La Nación, esa situación fue alertada en Casa Rosada ante una posible violación a la ley de fin de mandato. Es que la ley 25.917 establece que no se pueden vender activos en los últimos seis meses antes de las elecciones nacionales.

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Pelea de fondo

Pero el traspaso de terrenos de Nación a Ciudad -y su revisión parcial- es sólo un foco de conflcito en un tira y afloje que se mantiene entre Fernández y Horacio Rodríguez Larreta. Se podría citar, también, la disputa por la coparticipación, del cual el Frente de Todos pretende que se rebaje un 1,5 puntos porcentuales de los fondos destinados a la Ciudad.

"Lo que buscan es tenerlo alineado a Horacio (Rodríguez Larreta)", dicen desde Parque Patricios. Se sabe que el Jefe de Gobierno porteño finaliza su mandato en 2023, sin posibilidad de una nueva reelección en la Ciudad.

Rodríguez Larreta no desvía su enfoque de la gestión. Sin embargo, no son pocos en el Pro los que lo colocan como uno de los principales candidatos para pelear por la Rosada en las próximas elecciones, en el mismo escalafón que Mauricio Macri. La relación entre ambos pareciera ser intocable: un almuerzo, la semana pasada, es otra prueba de ello.