Busca Macri convencer a Monzó en Asia para que no deje Diputados en medio de la campaña
Luego de que convenciera a Miguel Ángel Pichetto en suprimir la convocatoria a sesiones extraordinarias del Congreso y le aportara a Mauricio Macri el primer éxito legislativo del año, Emilio Monzó acompañará al presidente en la gira por Asia e intentará dirimir una salida precipitada de su cargo.
El primer mandatario reniega de la posibilidad y buscará aprovechar la intimidad del viaje para convencerlo de que culmine con su mandato al frente de la Cámara de Diputados.
La importancia del titular del cuerpo legislativo es esencial para el entramado de Cambiemos. De cuna peronista al igual que Rogelio Frigerio, ambos se erigieron como los garantes de la gobernabilidad y fueron las principales espadas oficialistas para cristalizar acuerdos con gobernadores y legisladores, los cuales redundaron en leyes celebradas por la Casa Rosada.
Sin embargo, su desencanto con las órdenes impartidas por Marcos Peña y la paulatina exclusión que sufrió de las reuniones de la mesa chica del PRO erosionaron su ímpetu.
A fines del año pasado, cuando fue reelecto por unanimidad como presidente de la Cámara baja y zanjó que sería su último año en esa función, reivindicó la "rosca política" y envió un mensaje directo hacia el jefe de Gabinete, lo que le valió el aplauso de todo el recinto.
Días atrás, el periodista Jorge Asís aseguró que Monzó tiene decidido instalarse la próxima semana como embajador del Gobierno en Madrid. Aunque en los hechos parezca inviable, sí es concreta su voluntad de dejar el cuerpo a mediados de año, según consignó Infobae.
Mientras imagina a Diego Santilli como su sucesor, Macri apelará en el periplo por el continente asiático al fuerte vínculo que mantienen -sumado al lazo que vincula a sus esposas- para intentar retenerlo, a sabiendas de que una eventual candidatura de Cristina Fernández de Kirchner le otorgaría al kirchnerismo un aluvión de bancas en la recomposición del recinto y prescindir de su amigo derivaría en un fuerte costo político.