En un nuevo capítulo de la tensión entre el Gobierno y los trabajadores del Estado, este miércoles Aerolíneas Argentinas llevó a cabo la asamblea de accionistas y concretó la expulsión del directorio del titular del gremio de los pilotos, Pablo Biró. El secretario de Transporte, Franco Mogetta, había anticipado en septiembre último que el Ejecutivo avanzaría con el despido "con causa" por los "graves daños" que el sindicalista le causó a la empresa.

El despido se efectivizó con el aval de cuatro directores durante la reunión que fue impugnada por el sindicalista. Con esta decisión, el Estado -que es el mayor accionista de Aerolíneas- determinó que Biró deje de ser el representante de los trabajadores en la empresa. Posteriormente, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), que comanda el gremialista echado, anticipó que hará una presentación judicial para intentar revertir la decisión.

La reunión de los directivos de la aerolínea de bandera, que comenzó pasadas las 11, se realizó en las oficinas del Aeroparque Metropolitano, con la "remoción con causa del director Pablo Biró por violación de los deberes impuestos a los directores conforme el artículo 59, 274 y concordantes de la ley de Sociedades" en el orden del día.

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La asamblea concretó la acción oficial que se había anunciado hace más de un mes, cuando Mogetta también había adelantado que se iniciarían causas judiciales contra los referentes de los trabajadores que desarrollaran medidas de fuerza para reclamar por la situación salarial y en contra de la privatización de la compañía.

"Es una decisión tomada", había advertido el funcionario durante el conflicto aéreo por los dos paros que había convocado Biró en las primeras semanas de septiembre. "Solo defiende intereses personales", agregó al justificar que sería echado "con causa" por los "graves daños" generados a la empresa.

"Estamos excluyéndolo del directorio de Aerolíneas y se están iniciando acciones civiles de daños y perjuicios para recuperar las pérdidas de la compañía. Se despedirá a quienes no cumplan con sus tareas, de acuerdo con el nuevo marco normativo", había expresado. "Vamos a corregir estas salvajadas de estos muchachos, para que la gente pueda viajar mejor", enfatizó. 

Además, el ministerio de Seguridad había denunciado al titular de la APLA "por el presunto delito de extorsión y amenazas" tras las declaraciones en las que el gremialista advirtió que el conflicto en torno al transporte aéreo se iba a poner "mucho peor".

"Dichas afirmaciones generan serias preocupaciones sobre el impacto que podrían tener en la operación de Aerolíneas Argentinas. y en la seguridad de los pasajeros", habían precisado desde el Gobierno.

Mientras tanto, desde el Ejecutivo continúan en la búsqueda de consensos en el Congreso para retomar el proyecto de privatización de la empresa. Hasta el momento, logró que el diputado del PRO Hernán Lombardi presentara un proyecto en el que declara a la compañía "sujeta a privatización" y además autoriza a la Casa Rosada a "establecer el marco legal y llevar adelante el procedimiento para instrumentar el proceso de venta".