Luego de haber impulsado un "rediseño del Gobierno" de La Libertad Avanza a través de un pacto con el PRO tras el fracaso de la Ley Ómnibus en el Congreso, ahora Patricia Bullrich le bajó el precio y consideró que hay "mucha espuma" en torno al tema, porque eso "ya ocurre". Asimismo, volvió a dejar en evidencia que su diálogo con Mauricio Macri está quebrado y lo desafió de cara a las elecciones del partido amarillo, que pronto debe renovar su titularidad. 

"Toda esta espuma de que el PRO está alineándose… Hay mucha espuma más que otra cosa. Quizás tiene que ver que el 19 de marzo hay elecciones en el PRO y hay cambio de presidente", aseguró la ministra de Seguridad en radio La Red. 

"Yo represento a una parte muy importante del PRO, la parte mayoritaria diría, y por eso logré, cuando nadie lo pensaba, ganar una interna. Mostré que el pensamiento que yo tenía era el dominante en el PRO", remarcó la actual líder del partido, de cara a los comicios internos. 

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De todas formas, la funcionaria aclaró que Macri "no tiene claro" si quiere ser presidente del partido y reflexionó sobre su distanciamiento con el exmandatario: "Es un problema de que yo creo que al cambio hay que apoyarlo sin especulaciones. Yo soy más directa, estoy convencida de eso, y cuando me convenzo de algo voy al frente". 

"Lo que hago es totalmente coherente, como lo hicimos cuando salimos a apoyar a Milei en la segunda vuelta para ganar contundentemente", recordó. 

Ante la insistencia de los periodistas, al consultarle en reiteradas ocasiones sobre el fundador del PRO, la Ministra señaló: "No me interesa hacer una entrevista siendo la psicóloga de Macri. Si quieren una entrevista con Macri, hablen con Macri". 

A la hora de referirse a su decisión de ser parte del Gobierno de Javier Milei, Bullrich ratificó que "no le tiene que pedir permiso a nadie" y recordó que "sectores de Juntos por el Cambio fueron reacios a acompañar un cambio", lo que provocó "una crisis" en el partido que gobernó el país en el período 2015-2019.