Un asesor de la vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Verónica Magario, fue asesinado de un tiro en el pecho cuando dos delincuentes quisieron robarle el auto.

El hecho ocurrió en la noche del jueves, cuando Carlos Fernández, de 63 años, pasaba caminando por la esquina de la avenida San Juan y Castro, en el barrio porteño de Boedo.

Tras el asalto, en el que se cree que fue baleado luego de que los delincuentes no pudieran concretar el robo, el hombre fue trasladado al hospital Ramos Mejía, donde finalmente falleció.

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Fernández estaba acompañado de un amigo, al que había ido a visitar y que vive frente al lugar del ataque. La Fiscalía Nº 56, que encabeza Edgardo Orfila, está a cargo de esclarecer el hecho, con un expediente por homicidio en ocasión de robo. 

La Policía de la Ciudad está buscando a los delincuentes, ayudada por las declaraciones de un testigo, que informó que "uno estaba con campera marrón y el otro con chaleco negro".

"Venía del supermercado sobre San Juan y en Castro escuchó un disparo. Cuando levanto la vista veo a dos muchachos, de entre 20 y 30 años, que cruzan la avenida en pleno tránsito", continuó el hombre.

"Un policía también escuchó y se acercó. Empezó a llamar a los patrulleros y yo por las dudas me volví para mi casa. Fue antes del partido de la Selección", indicó.

Con respecto a cómo se manejaron los ladrones, señaló: "Tenían la cara descubierta. Hay dos cámaras en esta cuadra".