Emulando la final de la Supercopa Argentina en Mendoza, River Plate volvió a vencer con autoridad 2-0 a Boca Juniors, gracias a los goles de Gonzalo Martínez y Nacho Scocco.

Con un planteo táctico deslumbrante de Marcelo Gallardo, el Millonario se impuso a su clásico rival en La Bombonera durante largos pasajes del encuentro. Mientras que Lucas Pratto se ubicó sobre la derecha para complicar a Emmanuel Mas, Rafael Santos Borré explotó su velocidad para presionar a los centrales xeneizes.

Y aunque una lesión le permitió jugar tan solo 22 minutos, el gran comienzo del Pity Martínez jugando a espaldas de Wilmar Barrios y su magnífico gol de volea de zurda, significaron un duro golpe anímico para los locales.

El gran despliegue del mediocampo, el correcto trabajo de Casco y Montiel, y dos buenas intervenciones de Franco Armani fueron determinantes para que River derrote al super Boca que armó Daniel Angelici a fuerza de dólares.

Con escasa participación en el funcionamiento del equipo de un cada vez más intrascendente Carlos Tevez y la mala fortuna frente al arco de un Darío Benedetto que todavía está retornando a su nivel, al Xeneize le costó desnivelar y perforar una férrea y experimentada defensa visitante.

A su vez, una pésima actuación de Mauro Vigliano en jugadas determinantes concluyeron en un malestar general que derivó en un pequeño altercado cuando concluyó el partido.