Un nuevo ataque con drones por parte del grupo extremista Hezbollah dejó un saldo de al menos 67 personas heridas en la zona de Binyamina, en el centro de Israel. Según indicaron medios locales, cuatro víctimas se encuentran en estado crítico, cinco presentan lesiones graves y 14, moderadas. 

Las víctimas fueron trasladadas en su mayoría a los centros médicos Hillel Yaffe, Sheba, Rambam, Rabin y otros hospitales de la zona.

Decenas de drones fueron enviados, pero solamente uno logró llegar a su destino, en un incidente que ocurrió sin que se activaran las alarmas, por lo que los habitantes no pudieron refugiarse como suelen hacerlo ante las advertencias sonoras. Hezbollah se adjudicó el ataque que fue lanzado desde Líbano. 

Tres de los heridos de mayor gravedad fueron trasladados vía aérea a Sheba, mientras que otros dos al hospital Rambam. Por otra parte, 28 heridos fueron evacuados en ambulancias. 

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"El Ejército interceptó un dron que fue lanzado desde el Líbano hacia la zona naval del norte. Los civiles deben continuar siguiendo las directrices del Comando del Frente Nacional", indicó el Ejército en un comunicado breve. Luego, la Fuerza Aérea israelí reportó que interceptó otro dispositivo de vuelo autónomo, disparado desde territorio libanés. 

En medio de la escalada de violencia mutua y la enorme tensión, el grupo respaldado por Irán difundió la noticia de que lanzó "un escuadrón de drones de ataque contra un campo de entrenamiento en Binyamina, al sur de Haifa".

La prensa israelí informó, asimismo, que el Ejército estaba investigando por qué las alarmas antiaéreas no sonaron, así cómo tampoco la intercepción de todos los disparos.

Horas más tarde, el grupo terrorista difundió una grabación de audio de su líder abatido hace dos semanas, Hassan Nasrallah, en un bombardeo israelí en Beirut: "Contamos con ustedes para defender a su pueblo, sus familias, su nación, sus valores y su dignidad, y para defender esa santa y bendita tierra y a este honorable pueblo". 

En tanto, durante las primeras horas de este domingo 13 de octubre, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, instó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a retirar "inmediatamente" de la zona de batalla a las fuerzas de paz presentes en el Líbano (Finul) para ponerlas "fuera de peligro".