El martes 14 de mayo, Jair Bolsonaro será premiado en Nueva York como la "persona del año", un tradicional premio que la Cámara de Comercio Brasil-Estados Unidos otorga a las personalidades más destacadas de ambos países.

Sin embargo, la controversia que ha generado su designación no tiene precedentes: auspiciantes de primer nivel han desistido de participar y numerosos activistas presionan para cancelar el evento.

La cena de gala, que inicialmente se iba a realizar en el Museo de Historia Natural de la ciudad estadounidense, fue trasladada al céntrico hotel Marriott Marquis a raíz del aluvión de críticas impartidas desde el establishment y las más altas esferas de la política, quienes vinculan la elección al estrecho vínculo que Donald Trump mantiene con su par brasileño.

En este contexto, la aerolínea estadounidense Delta, el diario británico Financial Times y la consultora Bain & Company retiraron su millonario patrocinio a la ceremonia, a la que cada año asisten más de 1000 personas, entre líderes del mundo de las finanzas, los negocios y la diplomacia de ambos países. Las entradas cuestan US$30.000 dólares y ya están agotadas.

Obstinado en cancelar el evento, el senador estatal Brad Hoylman impulsó una campaña con el hashtag #CancelBolsonaro para que el hotel Marriott desista de albergar la premiación, la cual ya juntó 53.000 firmas.

Es que Hoylman, quien reconoció abiertamente ser homosexual, repudia la glorificación del mandatario brasileño que, en numerosas oportunidades, ha dicho que preferiría que un hijo suyo muriese a que fuese gay.

La visita de Bolsonaro a Nueva York será, según la Cancillería brasileña, del 12 al 15 de mayo y, por ahora, la premiación se realizará en el Marriot. Desde el mítico hotel explicaron que no pueden "discriminar a nadie por sus creencias, si la legalidad y la seguridad no se ven amenazadas". 

"Dar la bienvenida a todos y ser inclusivo significa incluir a grupos que pueden o no compartir los valores de nuestra compañía. No obstante, permitir a un grupo que use nuestras instalaciones de ninguna manera significa que apoyamos sus posiciones", sentenciaron en un comunicado.

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