La Santa Sede informó este lunes que el papa Francisco sufre "una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que obligó a modificar aún más la terapia" y precisó que "el cuadro clínico complejo requerirá una hospitalización adecuada".

Con estas palabras, el Vaticano confirmó así que el Sumo Pontífice continuará internado en Instituo Gemelli de Roma, aunque el portavoz Matteo Bruni evitó dar plazos puntuales sobre su permanencia en el centro médico.

Bruni notificó además que Francisco, de 88 años, desayunó y leyó los periódicos esta mañana y que continuaba con sus tratamientos farmacológicos para una salud respiratoria delicada, ya que a Jorge Bergoglio le extirparon parte de un pulmón durante su juventud.

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El vocero vaticano explicó también que el líder de la Iglesia católica descansó bien y pasó "tranquilo" su tercera noche en el hospital, mientras continúa su tratamiento para la infección de las vías respiratorias.

Francisco fue ingresado en "estado regular" el viernes pasado por el agravamiento de una bronquitis. Los médicos confirmaron el cuadro infeccioso y prescribieron "reposo absoluto" junto con medicación. 

Debido a la internación, el Papa no pudo pronunciar este último domingo la oración del Ángelus, y envió un comunicado en el que manifestó: "Todavía necesito tratamiento para la bronquitis".

En el mismo texto agradeció "el afecto, la oración y la cercanía" de quienes lo acompañan en este momento y le envió una dedicatoria a "los médicos y al personal sanitario" del nosocomio en el que se encuentra porque "realizan un trabajo maravilloso y muy agotador".

El texto fue publicado tras la celebración de la misa del Jubileo de la Cultura, en la que el cardenal José Tolentino de Mendonça leyó la homilía de Francisco. "Me habría gustado estar con ustedes, pero como saben, me encuentro aquí en el Policlínico Gemelli porque todavía necesito algo de tratamiento para mi bronquitis", había añadido tras su segunda noche internado. 

El sacerdote a cargo de la Iglesia romana desde el 2013, se vio obligado a cancelar no solo su presentación del domingo sino también su prevista visita de este lunes a los míticos estudios de cine de Cinecitta, uno de los momentos más destacados del Jubileo de la Cultura que estos días reúne en Roma a más de 10.000 artistas de un centenar de países.