Una semana después de ser condenado a tres años y seis meses de prisión por la venta ilegal del predio de La Rural, Domingo Cavallo reapareció en televisión para marcarle la cancha al Gobierno nacional. Luego de hacer una férrea defensa de su gestión, rechazó el programa de altas tasas del Banco Central, pidió establecer reformas similares a las de la década del '90 y le sugirió al presidente dolarizar la economía.

El exministro de Economía, sentenciado junto a Carlos Menem por firmar el boleto de compraventa del predio en un precio muchísimo menor al valor que tenía, aseguró que desde 2012 el país atraviesa un proceso de estanflación, advirtió sobre el peligro de una hiperinflación y les endilgó a Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri haber hecho una interpretación completamente errónea de la historia económica argentina.

Cavallo reivindicó su desempeño como funcionario del gobierno menemista y dejó en claro que el problema de Argentina fueron los últimos 15 años. "Hemos tenido 10 años de estabilidad. Desde el 1 de abril de 1991, cuando implementamos la convertibilidad, hasta diciembre de 2001, prácticamente no tuvimos inflación y las cuentas fiscales daban superávit", argumentó, en relación a un período que se caracterizó por un importante atraso cambiario. 

El economista liberal, que según consignó Marcelo Bonelli está trabajando junto a su colegas Miguel Ángel Broda y Ricardo López Murphy en un programa integral para que el presidente aplique luego de las elecciones, le aconsejó al Ejecutivo nacional dolarizar la economía y criticó la política restrictiva que implementó Guido Sandleris.

"Si yo fuera Macri, pactaría los contratos laborales y todo el sistema jubilatorio en dólares. Así, se resolvería el problema de la constante indexación, que perpetúa la inflación", puntualizó, y añadió, taxativo: "Pretender evitar la devaluación y la suba del dólar con tasas de interés tan altas es la mejor forma de fracasar".