Una familia tipo porteña, propietaria de una vivienda, necesitó $684.115 en febrero para no ser considerada pobre, lo que significa una suba de 14,9% respecto al mes anterior, según detalló el informe que este lunes difundió la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.

Además, el mismo núcleo familiar, compuesto por una mujer y un hombre de 35 años de edad económicamente activos y con hijos varones de 9 y 6 años, precisó $402.752 para no caer por debajo de la línea de indigencia, correspondiente a la Canasta Básica Alimentaria (CBA).

Asimismo, en el segundo mes del año, debió contar con ingresos por $1.017.520,79 para pertenecer a la clase media porteña. El mismo informe estableció que, aquellos grupos que perciben $3.256.066,52 o más forman parte de los "sectores acomodados".

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Por su parte, una pareja de adultos mayores económicamente inactivos y propietarios de vivienda requirió $203.357 para no ser indigente y $334.149 para no ser pobre; mientras que un hogar unipersonal, integrado por un varón de 25 años económicamente activo y propietario, necesitó $132.050 y $231.638, respectivamente.

En tanto, la CBA para una una pareja de una mujer y un varón de 25 años, ambos económicamente activos y propietarios, ascendió a $244.292 y la Canasta Básica Total (CBT), que marca la línea de pobreza, a $389.224.

El panorama se complica aún más para quienes alquilan, ya que una pareja de 25 años económicamente activa pero no propietaria de vivienda requirió en febrero $244.292 para no ser considerada indigente y $461.262 para no ser pobre.

En cuanto a la Canasta Alimentaria para una familia tipo porteña, se elevó a $419.844 y la Canasta Total a $814.017, mientras que en enero habían sido de $367.823 y $710.493, respectivamente.