El Gobierno suspendió de forma preventiva la compra de Telefónica por parte de Telecom
El Ejecutivo indicó, a través de un comunicado de la Oficina del Presidente, que "la participación resultante de la operación implicaría una concentración del 61% para el mercado".
A través de la secretaría de Industria y Comercio del ministerio de Economía, el Gobierno dictó este viernes una medida preventiva que suspende los efectos de la compra de Telefónica por parte de Telecom.
La medida se sustenta en la recomendación de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, atento a que la fusión de ambas compañías incrementaría en forma significativa su participación en el mercado.
En este sentido, la participación resultante de la operación implicaría una concentración del 61% para el mercado de telefonía móvil; 69% para la telefonía fija; y, respecto al servicio de internet residencial, en algunas zonas del país la concentración podría llegar al 80%.
"El proceso de evaluación de los efectos de la adquisición notificada a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia exige el máximo rigor, respetando la normativa aplicable y los estándares internacionales, en atención a la relevancia que tienen las telecomunicaciones en el mundo actual", destacó un comunicado de la Oficina del Presidente.
"Es por ello que, a partir de la recomendación formulada por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, se ha tomado la decisión de resguardar la transparencia y libre concurrencia del mercado mediante la medida preventiva hasta tanto se profundice el análisis de la operación notificada", precisó.
A través de la medida, el Gobierno dijo cumplir con su "obligación de garantizar los derechos de los usuarios y consumidores, así como de defender la competencia contra toda forma de distorsión de los mercados".
Tras el anuncio de la compra, el Gobierno había asegurado el pasado 24 de febrero que ante la "potencial adquisición del Grupo Telefónica por parte de Telecom, del Grupo Clarín", el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) y la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNCD) estudiarían el caso.
"Esta adquisición podría dejar aproximadamente el 70% de los servicios de las telecomunicaciones en manos de un solo grupo económico, lo que generaría un monopolio formado gracias a décadas de beneficios estatales que recibió dicha empresa. De ser así, el Estado nacional tomará todas las medidas pertinentes para evitarlo", advirtió entonces la Casa Rosada.