El Fondo Monetario Internacional (FMI) empeoró su proyección para la economía argentina en 2024 al estimar que el Producto Bruto Interno (PBI) caerá un 3,5%, según se desprende de la actualización del informe de Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, por sus siglas en inglés) publicado este 16 de julio. 

La nueva cifra representa un retroceso de 0,7 puntos porcentuales respecto del último reporte, emitido en abril pasado, cuando la entidad liderada por Kristalina Georgieva había pronosticado una baja del 2,8%.

En ese entonces, el organismo multilateral de crédito había vaticinado un crecimiento del 5% para 2025, estimación que ahora mantuvo. Además, señaló que la economía argentina sufrió en 2023 una retracción del 1,6%.

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Con respecto a la inflación local, el documento no brindó nuevas precisiones, pero en la conferencia en la que se presentaron los nuevos datos los funcionarios del Fondo destacaron la desaceleración del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y estimaron una mejora en la variación anual al ubicarla en 140% para 2024, frente a un 149,4% previsto tres meses antes.

A su vez, el FMI empeoró levemente las perspectivas de crecimiento de América Latina y el Caribe, donde espera un alza del PBI regional del 1,9%, mientras en abril calculaba una suba del 2%, algo que vinculó "esencialmente" a la contracción fiscal en la Argentina. Sin embargo, ajustó a la suba la mejora para el año próximo y ahora pronostica un 2,7% de expansión.

En este contexto, hizo foco en Brasil y México, para los que indicó que "el crecimiento se ha revisado a la baja" debido al "impacto a corto plazo de las inundaciones" y a "la moderación de la demanda", respectivamente. En el primer caso, vaticinó un alza del 2,1% y en el segundo, del 2,2%, mientras que antes proyectaba 2,9% y 3,2%. Para 2025, en tanto, espera una suba del PBI del 2,4% y del 1,6% en cada caso.

A nivel global, la actualización del informe de Perspectivas Económicas Mundiales ratificó que la economía se desarrollará un 3,2% en 2024 y un 3,3% en 2025. En este último caso, un 0,1% más que en su última estimación. 

De todas formas, el reporte indicó que la aceleración de precios de los servicios "lastra la desinflación y complica la normalización de la política monetaria". Al respecto, señaló que esto "aumenta el riesgo de una mayor inflación y se perfila un panorama de tasas de interés más altas durante más tiempo en medio de crecientes tensiones comerciales e incertidumbre al alza respecto de las políticas". 

"Para gestionar estos riesgos y preservar el crecimiento, debe secuenciarse con detenimiento la combinación de políticas a fin de lograr la estabilidad de precios y reponer unas reservas mermadas", recomendó el documento.

Asimismo, remarcó que "el crecimiento durante el primer trimestre, respecto del informe WEO de abril de 2024, sorprendió de forma positiva en muchos países, aunque las sorpresas negativas en Japón y Estados Unidos fueron notables".