En el marco de un contexto de alta inflación y conflictividad social, el Gobierno nacional, a través del ministro de Trabajo Claudio Moroni, convocó a una sesión plenaria del Consejo del Salario para debatir la actualización del haber mínimo, vital y móvil como también de las prestaciones por desempleo. 

Claves de la reunión del lunes

• Objetivo: la finalidad del encuentro será consensuar la determinación del Salario Mínimo, Vital y Móvil, en el marco de lo dispuesto en la Ley Nº 24.013, y definir los montos mínimo y máximo de la prestación por desempleo.

• Idas y vueltas: inicialmente, la reunión estaba prevista para el 18 de agosto según se expresaba en la Resolución 7/2022. Pero una serie de eventos y peticiones de distintos representantes motivó que el encuentro se postergue para este lunes. 

• Agenda de reuniones: el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil sesionará primero a las 14 contando con la participación de dos representantes por sector en la llamada Comisión Técnica. Posteriormente, una hora después, se dará inicio al plenario de 32 miembros  (16 por la parte trabajadora y 16 por la empleadora). En ambos casos, cabe aclarar, los encuentros se realizarán de forma virtual. 

• Dudas y discrepancias: la CGT, la CTA y la CTA Autónoma aún no determinaron la postura que presentarán en la reunión tripartita. Dichas centrales, se reunirán -de forma previa al encuentro del Consejo del Salario- con sus respectivas conducciones para determinar la posición a plantear en le reunión tripartita.

• Última reunión: el último encuentro había ocurrido el pasado 16 de marzo. En aquella oportunidad se resolvió un aumento del 45% sobre la base del mes de marzo en cuatro tramos. Vale recordar que aquel mes, el IPC medido por el INDEC tocó casi el 7%. Como consecuencia, el monto del Salario Mínimo, Vital y Móvil, pasó de $33.000 a $47.850. En ese contexto, se estableció que el aumento debía ser de 18% en abril, 10% en junio, 10% en agosto y 7% en diciembre. Ya en ese entonces, la convocatoria para el mes de agosto se consideraba necesaria en caso de que la situación socioeconómica de los trabajadores y desocupados empeorara.