En diálogo con Pablo Wende, Bausili remarcó que no ve el escenario de que el país entre en default en 2020. Para el secretario de Finanzas, los vencimientos para ese año no serán altos y sólo necesita hacerse un roll over (renovación) de lo que vence. Sin embargo, deslizó la posibilidad de default en el caso de que Macri se vaya de la Casa Rosada. “Por supuesto siempre puede ocurrir que un nuevo gobierno genere tal nivel de desconfianza que ni siquiera pueda refinanciar los vencimientos”, subrayó.

Crecimiento de la deuda


Durante la gestión de Macri, la deuda externa se duplicó y equivale prácticamente a la totalidad del PBI del país. Para Bausili, los niveles de deuda son sustentables siempre y cuando baje la tasa de interés de las renovaciones anteriores. “A los niveles actuales del 12% en dólares es cierto, sería impagable. Pero se supone que en la medida que se recupere la confianza y se acomoden las variables, la tasa de interés para refinanciar será muchísimo más baja”, explicó y, en el mismo sentido, afirmó que al Gobierno le preocupa que los bonos rindan 12% anual: “Trabajamos para bajar esos rendimientos”.

Sobrante de u$s 10 mil millones


El Tesoro tiene un sobrante que rondará los u$s 10 mil millones (debido a los futuros vencimientos, puede rondar entre u$s 6 mil y 11 mil millones). El secretario de Finanzas manifestó que se venderán a partir de abril, pero no explicó cómo será la modalidad: pueden ser vendidos al BCRA o directamente en subastas al mercado, para aumentar la oferta de divisas y mantener el dólar quieto.


La próxima visita de las autoridades del FMI será en febrero y el organismo multilateral revisará las cuentas del Gobierno para chequear que se estén cumpliendo las pautas del préstamo. Bausili expresó que “no habrá inconvenientes” y que el nuevo desembolso se sumará a las arcas en marzo.