El fútbol argentino no ha sido ajeno al ajuste que implementó Mauricio Macri desde que arribó a la Casa Rosada. Luego de derogar en febrero de 2017 el Fútbol Para Todos, dinamitar los subsidios y proporcionarle los derechos televisivos a capitales privados, el Gobierno nacional se ahorró aquel año más de $2300 millones. Esa determinación no sólo supuso un golpe al bolsillo para los pesificados, sino que en el último año el pack privado aumentó por encima de los índices inflacionarios.

Ayer, según consignó el portal Doble Amarilla, fuentes de la televisión confirmaron que desde mayo el paquete pasará de costar $450 a $510 mensuales. Desde que entró en vigencia en octubre de 2017, sufrió cuatro incrementos. En marzo de 2018, previo a que se desatara la primera corrida cambiaria, el valor subió por primera vez, de $300 a $330. Desde ese entonces, reflejó un alza del 54%, mientras que la inflación interanual oscilará entre el 45 y el 48%, según las consultoras privadas.

Para FOX Sports y TNT, el negocio es categórico. La meta inicial de 1,5 millones de suscriptores se sobrecumplió rápidamente, con más de 2 millones de abonados al comenzar la actual Superliga. En estos momentos, el número alcanza a 2,7 millones, sobre un mercado argentino que cuenta con cerca de 10 millones de hogares asociados a algún operador de TV por cable o satelital. ¿El negocio de las compañías audiovisuales? Ronda los $9000 millones anuales.

Las entradas

Sin embargo, el fútbol por televisión no ha sido la única rama afectada por la inflación. En las categorías domésticas, pese a que el último incremento data de fines de agosto del 2018 -un ticket para presenciar un partido de la Superliga en una popular cuesta $400-, entre mediados de 2017 e inicios de 2018 las entradas ya habían engrosado su precio, en nueve meses, un 60%.  

Por otra parte, los equipos que el año pasado disputaron competencias internacionales fueron autorizados por la AFA a ajustar los valores de los tickets según la instancia. En River Plate, por ejemplo, una entrada popular para el partido de Octavos de Final de la Copa Libertadores ante Racing costó $500, contra Independiente, por los Cuartos de Final, $650, en semifinales $800 y ante Boca Juniors, en la final fallida, $1200. 

En la Selección Argentina las subas en los tickets habían sido palpables en la recta final de las Eliminatorias hacia el Mundial de Rusia. Un ingreso para ver en vivo al equipo de Edgardo Bauza ante Chile, en las populares del Monumental, en marzo de 2017, costaba $350. Siete meses más tarde, en el último partido de la etapa clasificatoria, una entrada para ver al conjunto de Jorge Sampaoli ante Perú, en La Bombonera, valió $550. Un alza del 157%. En los amistosos ante México que tuvieron lugar a finales de 2018, el montó de las entradas ascendió a $700: un incremento del 127%.