Promediaban los 27 minutos del primer tiempo del partido entre Estudiantes y Boca, por la fecha 11 de la Copa de la Liga, cuando se vivió un dramático momento en el estadio Uno Jorge Luis Hirschi. Javier Altamirano, jugador chileno del conjunto local, se desplomó en el campo de juego, sufrió convulsiones y debió ser retirado en ambulancia, generando consternación en todas las personas presentes.

Frente a esta situación, el árbitro Fernando Echenique decidió reunir a los capitanes, José Sosa y Edinson Cavani, y suspendió el partido de manera definitiva. Una vez tomada la decisión, la voz del estadio comunicó que el mediocampista había recuperado el conocimiento en el Instituto Médico Platense, ubicado a metros del Uno. 

Las imágenes de la televisión captaron brevemente el momento, hasta que al comprender la gravedad de la situación, enfocaron otra imagen. Los primeros que asistieron a Altamirano fueron sus compañeros Santiago Ascacíbar y Enzo Pérez, este último, rompió en llanto. También ingresó rápidamente el entrenador Eduardo Domínguez, quien desesperadamente llamó a la ambulancia. 

TE PODRÍA INTERESAR:

"No teníamos mucha idea de la situación real. Vivió otro episodio en la ambulancia. La vida va por otro lado. Lo hablamos en el día a día, hay otras cosas más importantes que un partido: la salud, la familia... Cuando pasan estas cosas hay que dar el ejemplo", explicó Domínguez momentos después. "En el vestuario había chicos llorando. Su señora está embarazada (…) No dejan de ser sensaciones duras. Nos tocó a nosotros. A veces es tan frívolo todo y no miramos la angustia que sucede acá, todo lo que conlleva. Sabemos que se nos va a ajustar el calendario, pero eso es secundario. Esperemos que se estabilice", agregó. 

Además, el entrenador "Pincha Rata" agradeció el apoyo por parte de la delegación xeneize: "Nos vinieron a apoyar y nos dijeron que decidiéramos nosotros qué hacer". "Quiero recalcar que Boca siempre estuvo a disposición", concluyó. 

Minutos después, tomó la palabra el capitán de Estudiantes, Sosa, en una breve rueda de prensa donde remarcó: "Más allá del partido de fútbol sentimos una preocupación muy grande por lo que pasó. También queremos agradecerle la paciencia a los árbitros y al equipo contrario porque más allá del malentendido y de que no se podía escuchar, ellos estaban con nosotros esperando".

"Nos ponemos en el lugar de nuestro compañero, de la familia y de la mujer que está embarazada y estaba también acá en el estadio. Trataremos de esperar durante la noche novedades positivas y de descansar un poquito de esta situación que no es buena para nadie, para ninguno", reiteró. 

Pasadas las 22, Hugo Montenegro, el médico de Estudiantes que estuvo en todo momento con Altamirano, brindó los primeros detalles del cuadro de situación del chileno: "Ya está bien, se determinó que fue una convulsión, ya se le hicieron los estudios de laboratorios, la tomografía dio bien. Quedó en observación en terapia intensiva. Es un cuadro que se determina después con los estudios. Lo importante es que salió de ese episodio, se le hicieron estudios, arrojaron buenas noticias, hay que complementarlos".

Más tarde, quien se enfrentó a los micrófonos fue el presidente de la institución de La Plata, Martín Gorostegui, quien destacó que "las personas y los protocolos funcionaron muy bien" y que están "muy contentos de haberle podido salvar la vida a Javier". 

Por último, antes de regresar a Buenos Aires, Diego Martínez, entrenador de Boca, aclaró: "Desde que nosotros entendimos la situación y la gravedad de lo que pasaba, nos pusimos a disposición de Estudiantes, del cuerpo técnico, del cuerpo arbitral y con José Sosa, los árbitros y yo decidimos que lo mejor era suspender el partido. Eso lo quiero aclarar por cualquier malentendido".

Pasadas las 23, Estudiantes emitió un parte médico en sus redes sociales en el que explicaron: "El jugador Javier Altamirano sufrió un episodio convulsivo. Se encuentra en internación bajo observación y para complementar estudios. Se realizó TAC, la que resultó sin imágenes patológicas evidentes. Se encuentra estable".

"Por esta situación, el partido, detenido a los 27 minutos del primer tiempo, fue suspendido por las autoridades arbitrales", finalizó.