El fiscal Carlos Stornelli está confiado en que la investigación de los cuadernos de las coimas que lleva adelante no tiene precedentes y salpica a altos mandos del poder político kirchnerista y a empresarios. Pese a su pasado en la mesa chica de Daniel Angelici y la cercanía con Mauricio Macri, el funcionario judicial xeneize no descarta ir contra el primo del presidente, Ángelo Calcaterra, en la causa que le abrió la puerta a una revancha contra Roberto Baratta, el ex funcionario que lo apartó de expediente de Río Turbio.

Consciente de que con las fotocopias de ocho cuadernos que el propio autor dijo haber incinerado en el fondo de su casa, Stornelli y el juez federal Claudio Bonadio apuestan a darle espectacularidad a la causa: no descartan sumar más nombres a la lista de detenciones y el fiscal se encargará de desfilar por los medios para ir comentando los avances y mantenerse en la cima de la agenda.

Además, Stornelli también hará de relacionista público. En la cena del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI), el fiscal dialogó con los empresarios y diplomáticos invitados y remarcó que la causa llegará hasta las esferas más altas del poder.

Stornelli no sólo es un hombre cercano al entorno presidencial, sino que además es un enemigo confeso de Roberto Baratta, quien fue segundo de Julio de Vido en el ministerio de Planificación Federal, contra quien ahora encontró la puerta para una revancha judicial.

El 21 de marzo de este año, Baratta pidió que el fiscal sea apartado de  la causa en la que se investigan una serie de convenios firmados por Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT) y la Universidad Tecnológica Nacional, la Facultad Regional Santa Cruz (UTN-FRSC) por estudios técnicos. En consecuencia, el juez federal Luis Rodríguez, quien consideró válidos los argumentos expuestos, apartó a Stornelli por "sensación fundada de pérdida de objetividad”.

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Además, el fiscal admitió haber sido amigo del ex barrabrava de Boca, Rafael Di Zeo, antes de convertirse en el Jefe de Seguridad del club. Hace tres años, un documental dio detalles de la relación de Stornelli con la barra brava de Boca en su condición de jefe de Seguridad.