Elevan a juicio por "homicidio simple con dolo eventual" a los ocho imputados por la muerte de Maradona
La causa contra los profesionales que atendían al astro en la última etapa de su vida fue iniciada por los hijos del exfutbolista.
La Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro resolvió llevar a juicio a los ocho imputados en la causa iniciada tras la muerte de Diego Maradona, en noviembre de 2020. Todos ellos están acusados de “homicidio simple con dolo eventual”, ya que se considera que tuvieron algún grado de participación en la supuesta "internación domiciliaria" del exfutbolista en la localidad bonaerense de Tigre, donde falleció.
Aunque la resolución se conoció este viernes, fuentes judiciales señalaron que el tribunal decidió el jueves someter a proceso al neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, los médicos Nancy Forlini y Pedro Di Spagna, y los enfermeros Gisella Madrid, Ricardo Almirón y Mariano Perroni.
Para la legislación argentina, el delito de “homicidio simple con dolo eventual” prevé una pena de entre 8 y 25 años de cárcel.
La causa fue iniciada por Dalma, Giannina, Jana, Diego Fernando y Diego Junior, hijos del astro del fútbol argentino, quienes decidieron recurrir a la Justicia debido a las irregularidades que rodearon la muerte de Maradona, cuya atención en la última etapa de su vida era supervisada por Luque, su abogado y el cuerpo médico que éste había designado.
El campeón mundial con la selección argentina en México'86 falleció a los 60 años el 25 de noviembre de 2020 y la autopsia determinó que su deceso se produjo como consecuencia de un "edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada". También se descubrió que tenía una "miocardiopatía dilatada".
El ex jugador, quien además padecía problemas de adicción al alcohol, había sido ingresado en una clínica de la ciudad de La Plata el 2 de noviembre de 2020, por un cuadro de anemia y deshidratación, y un día después fue derivado a un sanatorio de la localidad bonaerense de Olivos, donde fue operado de un hematoma subdural.
El 11 de noviembre de ese mismo año recibió el alta y se trasladó a una casa en un barrio privado de Tigre, donde murió dos semanas más tarde. En aquella época, Maradona estaba dirigiendo a Gimnasia y Esgrima La Plata, donde había asumido su cargo en septiembre de 2019.