El padre de Pablo Grillo, sobre la salud del fotógrafo herido: "Lo vimos mejor, estamos esperanzados"
Fabián aseguró que está "esperanzado" por la condición de su hijo, que fue intervenido dos veces en la cabeza, además de someterse a una operación menor para colocar un sensor y monitorear su presión intracraneal.
En otro día tenso en las inmediaciones del Congreso por una nueva marcha de jubilados, con participación de La Cámpora, centrales sindicales, agrupaciones de izquierda y piqueteros, el padre de Pablo Grillo, el fotógrafo que debió ser internado en el Hospital Ramos Mejía herido de gravedad hace una semana, adelantó este miércoles que vio "mejor" a su hijo. "Nos fuimos más esperanzados", destacó.
"Lo vimos mejor, con algún movimiento en las manos, en los brazos. Mueve un poquito la boca, cosa que no lo hacía hasta ahora, eso lo vimos", detalló Fabián Grillo en diálogo con radio Splendid.
Según trascendió, el joven que fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas en la cabeza, además de una operación menor para colocar un sensor y monitorear su presión intracraneal, se encuentra "estable", a pesar de que no salió de su estado de gravedad.
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En este tono, Fabián apuntó contra la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a quien le pidió que "se tomen cartas en el asunto" para así "proteger a las personas que están registrando la realidad".
El cruce del papá de Pablo se produjo luego de que la funcionaria asegurara que el disparo "no fue directo a la cabeza" del trabajador de prensa. "Ni siquiera podría haber sido por la distancia a la que estaba", sumó la titular de la cartera de seguridad, al tiempo que aclaró que los efectivos actuaron según el "protocolo de la Gendarmería".
De todas formas, la ministra expresó su "total solidaridad" para la familia de Grillo, aunque destacó que querer "circunscribir a un gendarme por la destrucción cometida por aquellas personas que fueron a destruir al país" sería "dar la vuelta a la realidad".
En la misma conferencia de prensa, en la que presentó el proyecto de la "Ley Antibarras", apuntó contra un informe elaborado por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI), Revista Crisis y FM La Tribu, que indicaba un presunto "origen del disparo" y acusaron al "Cabo 1° Guerrero". Para Bullrich, los análisis no fueron "rigurosos".