En el mismo día en que el Papa Francisco recibió a la flamante primera dama, Fabiola Yáñez, la Iglesia salió al cruce del Gobierno nacional por la aprobación del protocolo para la interrupción legal del embarazo. La cálida bienvenida que el Sumo Pontífice le dio a la mujer del Presidente en El Vaticano contrastó con las duras críticas que le propinó Alberto Bachetey a Ginés González García, a quien calificó de abortista.

“No sorprende porque el ministro ya había advertido que no iba a entrar en una discusión por la ley, sino promulgar el protocolo vía Ministerio y obligar a las provincias a que se adhieran. La táctica es clarísima y era muy previsible, y  la ciudadanía argentina no está a favor del aborto, como quedó demostrado democráticamente en el Parlamento, en 2018. Así, ya se instala el aborto libre en la Argentina”, apuntó el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral de la Salud en declaraciones a la Agencia Informativa Católica (AICA).

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Además, el obispo lamentó que el nuevo protocolo habilite el aborto a partir de los 13 años porque “las niñas de esta edad podrán hacerlo incluso sin el consentimiento de sus padres”. También, lo consideró lesivo para la sociedad porque “avala muchos otros factores que no tienen que ver con riesgos de vida o de violación” al momento de pedir un aborto. “Esto es peor que la ley que quisieron promulgar en 2018, que lo aceptaba desde los 14 años”, aseguró.

Unas horas antes de las declaraciones del prelado, Francisco se había abrazado con Fabiola Yáñez. Fue en el marco de la inauguración de la nueva sede de la fundación pontificia Scholas Occurrentes, de la que participaron las primeras damas de Brasil, Belice, Colombia y Paraguay, además de los dos directores mundiales de Scholas, José María del Corral y Enrique Palmeyro.

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“Santo Padre, le envían de Argentina el cáliz de la misa por la unión de los argentinos que se celebró en la Basílica de Luján y que significó tanto para nuestro país”, le dijo Yáñez al Papa, en alusión al encuentro antigrieta que organizó la Iglesia el domingo pasado, en el que logró reunir a Alberto Fernández y Mauricio Macri, algo que sólo había ocurrido tras el triunfo electoral del primer mandatario sobre el ahora expresidente. En la cumbre de Luján, un reducido grupo de fieles insultó a Fernández por haber anunciado que enviaría al Congreso un proyecto de ley para legalizar el aborto.

“Los antiderechos siempre usan cualquier tipo de argumentos y hasta la Justicia para que no se cumpla la ley”, expresó González García, previo al cruce de Bachetey, en declaraciones a Radio La Red. Pese a las tensiones entre el nuevo gobierno y la Iglesia por la temática del aborto, ambas partes han encontrado consensos en el plan integral para luchar contra el hambre. Un mes atrás, la Conferencia Episcopal Argentina avaló el proyecto del oficialismo para proteger a los sectores más vulnerados por la crisis económica y envió a sus representantes a la mesa de trabajo para poner en marcha la iniciativa.