En el marco del conflicto entre las casas de altos estudios y el Gobierno de Javier Milei por el veto a la Ley de Financiamiento, la comunidad universitaria debate este lunes en todo el país la continuidad del plan de lucha en defensa de la educación pública superior.

Así lo señaló el secretario de la Federación Universitaria Argentina (FUA), Agustín Romero, quien en declaraciones a radio Splendid detalló que "se van a realizar, en simultáneo, más de 30 asambleas a nivel nacional" para enfrentar la medida presidencial.

Al respecto, destacó que "muchas de las facultades y universidades han votado sostener la toma de las facultades", como el caso de la Universidad Nacional de San Luis, que se reunió este domingo, y deseó "que hoy se puedan volver a tomar nuevas facultades en síntoma de apoyo al resto de las otras universidades a nivel nacional, pero también planteando un plan de lucha".

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"Parten de la base desde ruidazos, cacerolazos educativos, las clases públicas, porque si bien las facultades están tomadas, la idea es poder visibilizar el conflicto de cara a la sociedad con clases públicas en los diferentes horarios", enumeró Romero antes de adelantar el planteo de generar "interfacultades" para "unir" a todas las instituciones y preparar "otra nueva marcha".

Sobre las movilizaciones, ratificó su carácter político -criticado por la administración de Milei- y advirtió: "El ataque del Gobierno nacional es político también, no ataca a la universidad pública meramente por llevar al déficit cero, ataca a la universidad pública porque no solamente es fuente de pensamiento crítico, sino que al mismo tiempo es un derecho accesible para todo el conjunto, que nunca se privatizó". 

"Tiene un claro eje que es de ataque a todo lo público", subrayó el secretario de la FUA sobre el accionar de Ejecutivo nacional e insistió: "En ese sentido también se enmarca la educación y por eso nuestra respuesta por supuesto son marchas políticas".

En cuanto a las declaraciones de Milei, quien el pasado sábado en el acto de presentación del nuevo nombre del ex Centro Cultural Kirchner (CCK) -ahora "Palacio Libertad"- aseguró que las casas de altos estudios "no quieren ser auditadas", el joven remarcó que "ya se audita la universidad pública, a través de la AGN (Auditoría General de la Nación) que depende del Congreso".

"Además de que ya las auditorías se hacen, si invitaran al conjunto, es decir, estudiantes, agrupaciones políticas, nuestros docentes y no docentes, a formar parte de esa auditoría, lo que nos daríamos cuenta es que plata es lo que hace falta", afirmó.

En este sentido, denunció: "El Gobierno ataca y desfinancia nuestra universidad pública porque quiere avanzar en privatizarla, pero sobre todo también en un modelo de universidad que esté al servicio del mercado, de los propios amigos de Milei y de sus intereses, y no como el que hoy nosotros desde las universidades públicas ponemos al servicio de la población".

"Si él (por el jefe de Estado) supiera el componente de quienes hoy hacemos vida académica en las universidades públicas, se daría cuenta de que muchos somos primera generación, segunda generación de universitarios", puntualizó en alusión a la acusación del mandatario de que la educación pública superior "hoy no le sirve a nadie más que a los hijos de la clase alta y a los ricos", y sentenció: "Somos trabajadores, trabajadoras, hijos de trabajadores y trabajadoras, quienes vamos a seguir defendiendo el derecho nuestro a poder educarnos, contra un Presidente que por supuesto quiere una universidad no pública para unos pocos".