El titular del gremio La Fraternidad redobló la apuesta y anunció un nuevo paro para el 1° de marzo
En medio de la medida de fuerza que llevaron a cabo este martes y que dejó sin servicio a todas las líneas de trenes, Omar Maturano comunicó que tampoco trabajarán el Día del Ferroviario tras retrucar las críticas del Gobierno.
En medio de una jornada con complicaciones para el traslado debido a un paro de trenes que afectó a miles de pasajeros, el sindicalista Omar Maturano redobló la apuesta este martes y anunció que el 1° de marzo los conductores afiliados al gremio La Fraternidad no prestarán servicio porque se tomarán la jornada libre por el "Día del Ferroviario".
Asimismo, el líder gremial amenazó con nuevas medidas de fuerza durante febrero y le respondió al vocero presidencial, Manuel Adorni, quien acusó al grupo que representa Maturano de "extorsionar a los pasajeros" con su acción de lucha. "Los extorsionadores son los empresarios que aumentan los precios", expresó en conferencia de prensa este mediodía.
"El 1 de marzo cada conductor y cada ayudante de La Fraternidad no va a prestar servicio. Ese día se conmemora que en 1948 el general (Juan Domingo) Perón nacionalizó los ferrocarriles", explicó y sumó en la misma rueda informativa "un llamado al Gobierno nacional para que trate de preservar la paz social". En tanto, manifestó que "se resolvió dejar las manos sueltas o mandato libre de tomar la medida que se crea conveniente en febrero".
Las declaraciones cruzadas subieron el tono a la tensión entre los trabajadores del sector y el Gobierno nacional, que los responsabilizó por haber paralizado el servicio en el marco de una asamblea desarrollada entre las 9 y las 15 horas, con el consecuente cese de actividades.
TE PODRÍA INTERESAR: La Casa Rosada apuntó contra La Fraternidad por el paro de trenes: "A la administración de los Fernández le hicieron cero"
En ese contexto, Maturano encabezó la rueda de prensa desde la sede gremial y comunicó que "se resolvió un repudio total a las autoridades de los ferrocarriles argentinos, Trenes Argentinos", entre otras cuestiones, porque se usó la cartelería oficial para difundir su foto y señalarlo públicamente.
"Cuando haya demoras, cancelaciones o accidentes también deberemos poner en esos carteles indicadores los nombres de los responsables; por ejemplo del ministro de Economía (Luis Caputo), que no dio la plata para reparar los trenes, y de los directivos de las empresas", desafió y agregó: "Si es así, estoy de acuerdo que usen mi nombre y me hagan responsable de cualquier medida de fuerza".
Además, contraatacó ante la crítica de Adorni acerca de que "es difícil entender los intereses que defiende este gremio, que no les hacían paro a quienes destruyeron el país" y perjudican con su acción a los trabajadores mediante una "medida de fuerza extorsiva": "Hoy perjudicamos muchísimo más a la gente que salió a buscar trabajo, al que está desocupado o suspendido, que a los compañeros que tienen trabajo".
La medida respondió al rechazo del gremio a la oferta oficial de un aumento del 3,53%, cifra que consideran insuficiente frente a la inflación acumulada y el desfasaje salarial del 46% desde el inicio de la gestión de Javier Milei. El Gobierno, por su parte, argumenta que no puede excederse el incremento del 1% mensual.
Si bien la junta laboral estaba prevista de 9 a 15, antes comenzaron las cancelaciones de servicios y el cierre de estaciones, con persianas bajas, ante la acumulación de pasajeros que buscaban poder trasladarse. Largas filas se formaron en las paradas de colectivos como consecuencia de la ausencia de trenes.
La acción de lucha sindical, que según Trenes Argentinos afectó a casi 1 millón de personas, incluyó a todos los servicios de ferrocarriles en el territorio nacional, es decir las líneas Mitre, Sarmiento, San Martín, Urquiza, Roca, Belgrano Norte y Sur y el Tren de la Costa.