De 2015 a 2017: pinta Cambiemos de amarillo la Provincia y el peronismo se queda sin bastiones
El oficialismo consiguió un nuevo triunfo en el distrito más poblado del país. Con Vidal como líder, Buenos Aires se pintó de amarillo con respecto a las últimas elecciones. Cristina, firme en el tercer cordón.
Luego de derrotar al peronismo y alcanzar la gobernación en la Provincia de Buenos Aires en 2015 -aquello que parecía imposible-, Cambiemos ratificó los resultados de aquella elección e incluso mejoró los números, con la gobernadora María Eugenia Vidal como cara visible de campaña y el ministro Esteban Bullrich como primer candidato.
El distrito más poblado del país quedó pintado completamente de amarillo, con excepción del tercer cordón. El bastión peronista es el nuevo objetivo del oficialismo de cara a las futuras elecciones presidenciales.
El conurbano aportó una gran cantidad de votos a favor de Cambiemos. A pesar de que Unidad ciudadana sacó notables diferencias en distritos de la Primera y Tercera sección electoral, el oficialismo se impuso en varios distritos clave: Vicente Lopez. San Isidro, Tigre, Pilar y Lanús, entre otros.
De esta manera, el oficialismo ratifica el liderazgo en la Provincia. Si en las elecciones de 2015 la victoria era puesta en duda, ya que Vidal derrotó a Aníbal Fernández -acusado de pianta votos y de pésimo candidato-, la victoria de Bullrich sobre la expresidente muestra que Buenos Aires ya no es una provincia peronista.