85 personas siguen siendo extrañadas, 24 años después del peor atentado terrorista en Argentina. La AMIA se convirtió en un emblema nacional que dos décadas después sigue buscando justicia.

"Cada 18 de julio es otra bomba. Son 24 años sin justicia", dijo la mamá de Sebastián Barreiro, la víctima más jóven en fallecer por la explosión de la bomba frente a la mutual judía.