Centenares de personas con chaleco amarillo, al estilo de las protestas en Francia, desfilaron en Londres para denunciar la austeridad y reclamar elecciones generales anticipadas.

Y aunque la policía no comunicó cifras sobre la participación, se calculan más de 1200 personas en una manifestación que transcurrió con calma hasta Trafalgar Square, en el centro de la ciudad, al ritmo de tambores y gritos a través de megáfonos.

En las pancartas predominaban lemas contra el gobierno conservador de Theresa May. "El Reino Unido está roto. Elecciones generales ahora" o "May debe irse", fueron algunos de los reclamos esgrimidos.

El movimiento de los "chalecos amarillos" franceses, constituido por gente de las clases populares y medias que reclaman contra la política fiscal y social de Emmanuel Macron, se ha manifestado prácticamente sin interrupción todos los sábados desde noviembre, salpicados a cada ocasión por incidentes violentos.

Paralelamente a este desfile, decenas de personas simpatizantes del Brexit también salieron a las calles en Londres. Algunos también vestían chalecos amarillos y mostraban la Union Jack, la bandera del Reino Unido.

La tensión política es muy alta en Gran Bretaña ante el debate sobre la salida de la Unión Europea. Lo que provocó, al final de ambos cortejos, algunos enfrentamientos entre estas columnas opuestas.

La semana pasada, personas ataviadas con chalecos amarillos entonaron lemas de la English Defence League (EDL), un grupo marginal de extrema derecha que afirma luchar contra la amenaza islamista, según el diario The Independant.