Después de enamorarse del público argentino, como suele suceder con los artistas que pisan por primera vez un escenario en el país, la cantante estadounidense Taylor Swift ofreció esta noche su última presentación de las tres previstas en el estadio Monumental como parte de su gira “The Eras Tour”. Tras señalar en su primer concierto el jueves que el público local es “el más épico que existe” y quedarse varios minutos escuchando las ovaciones, la joven debió postergar su segunda presentación por el diluvio que azotó Buenos Aires el pasado viernes.

Así, el sábado brindó el que efectivamente la segunda presentación y este domingo cerró su primera visita a la Argentina con el que sus "apasionados" seguidores -tal como ella los definió- esperan que sea un “hasta luego”. "Hagamos que la última noche sea inolvidable", publicó la artista a través de una de sus cuentas oficiales antes del espectáculo.

Debido a las lluvias intensas registradas durante el viernes pasado en la Ciudad de Buenos Aires, el show que debía ofrecer en el estadio de River fue reprogramado “debido a las condiciones climáticas adversas, priorizando la seguridad del público”. Desde la organización local del evento, confirmaron inmediatamente después que “todos los tickets para la función del viernes seguirán siendo válidos para el show del domingo”.

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Unos minutos después de que la reprogramación se hiciera oficial, la cantante publicó un mensaje en sus redes sociales en el que afirmó que, a pesar de que le hubiese encantado “un show bajo la lluvia”, nunca "pondría en peligro a sus fans, a su equipo y a los artistas" que la acompañan.

“Hemos reprogramado el espectáculo de esta noche en Buenos Aires para el domingo debido a que el clima es tan caótico que sería inseguro intentar realizar este concierto”, explicó Taylor a sus “swifties”, como se conoce a sus fans.

A pesar de la decepción de no haber podido realizar su segundo show en el Monumental, la exitosa artista pop se mostró entusiasmada porque podría pasar “más tiempo en Argentina”.

Al igual que el jueves y el sábado, este domingo el show, de gran impacto visual y notable despliegue escénico, tuvo como marco un estadio Monumental colmado de público, que bailó y cantó con la estadounidense y le dedicó una inolvidable ovación.