El tenista argentino Marco Trungelitti se encontraba en Barcelona cuando le informaron que si llegaba a París a las 6 de la mañana del día siguiente, iba a tener la oportunidad de jugar en el cuadro principal del torneo. Ningún avión le garantizaba llegar a tiempo ¿Su solución? Viajar nueve horas en auto junto a su familia para disputar el partido.

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El deportista había perdido en la última ronda de qualy, pero ayer se retiró Kyrgios y Marco volvió en coche desde Barcelona (1.000 km) con su abuela, su madre y su hermano. El viaje valió la pena: se impuso por 6-4 5-7 6-4 6-4 ante Bernard Tomic y jugará los 64vos de final del máximo torneo de polvo de ladrillo.

El viaje de vuelta a Francia

"Volví a Barcelona, comí asado, tomé un cafecito, íbamos a ir a la playa, justo me vino a visitar mi abuela de 90 años, pero me avisaron que viniera a Roland Garros. Había paro de trenes, entonces viajamos en auto, manejé unas horitas y acá estoy", explicó el tenista entre risas.

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